Las fiestas decembrinas son sinónimo de celebración, y nada acompaña mejor estos momentos que la bebida adecuada. Desde cenas familiares hasta reuniones con amigos para despedir el año, las bebidas no solo acompañan los brindis, sino que también se convierten en símbolos de las tradiciones, gustos y tendencias que definen las festividades en México.
De acuerdo con un estudio reciente de Appinio, consultora global de investigación de mercados, los mexicanos tienen claras sus preferencias cuando se trata de bebidas alcohólicas, y muchas de ellas coinciden con las tradiciones que definen la temporada navideña.
Cerveza: la reina de las reuniones
Con un imponente 46% del consumo total, la cerveza se posiciona como la bebida favorita de los mexicanos. Ya sea acompañando las tradicionales cenas navideñas o como opción refrescante en las posadas, la cerveza se presenta como un elemento versátil que nunca falta en las celebraciones, adaptándose a cualquier momento del día o la noche.
Vino y brindis elegantes
El estudio también destaca la presencia de los vinos en la mesa mexicana. El vino tinto, con un 11% de consumo, ocupa un lugar privilegiado durante las festividades. Mientras que el vino blanco se queda con el 4%, los vinos espumosos como champaña, cava y prosecco, con el mismo porcentaje, son los elegidos para cenas formales y los brindis que marcan el inicio de un nuevo año, aportando elegancia y sabor a cada celebración.
Destilados y cremas alcohólicas, un toque de sofisticación y calidez
Los destilados, como el tequila, el whisky y la ginebra, representan el 25% del consumo, confirmando su lugar como favoritos en cócteles y celebraciones. Por su parte, las cremas alcohólicas, como Baileys y Kahlúa, alcanzan el 8%, ideales para sobremesas y momentos especiales.
“La temporada navideña es el escenario perfecto para que las bebidas alcohólicas cobren vida como protagonistas de las celebraciones. No solo se trata de consumir, sino de crear experiencias con nuestros seres queridos. Estos datos muestran cómo las marcas tienen una oportunidad única de conectar emocionalmente, ofreciendo productos que resalten en momentos clave como las cenas, los brindis y las reuniones familiares”, señaló Livia Mirón, directora general de Appinio en Latinoamérica.
Más que nunca, el consumidor busca algo más que una bebida; busca un catalizador de momentos mágicos. Las marcas que logren capitalizar esta conexión emocional con propuestas auténticas y relevantes tendrán un lugar privilegiado en las mesas de los mexicanos.