Louis Moinet, fabricante de exclusivos relojes suizos, considerados únicos por su combinación de arte y diseño, se ha distinguido siempre por el diseño de piezas con materiales realmente sorprendentes, sobre todo, en sus ediciones limitadas. Recientemente escogió a México como inspiración para lanzar su creación Only Mexico.
Se trata de una pieza única con la cual se rinde homenaje a las raíces de la cultura azteca, y de paso confirma que la imagen de México sigue siendo una apuesta tentadora.
Para la fabricación de este reloj, los ateliers de Louis Moinet recabaron minuciosamente información y materiales entre los más representativos de nuestro país para fusionarlos en este diseño original.
Only Mexico incluye en especial el material más antiguo que haya conocido el mundo: el meteorito Allende, hallado en el poblado del mismo nombre, en el estado de Chihuahua.
Además, está provisto del torbellino mecánico Louis Moinet, que recibió la Medalla de Oro en el último Concurso Internacional de Cronometría, y oscila a 21 mil 600 vibraciones por hora. También, incluye la célebre caja NEO de su autoría, tallada en oro rosa 5N y una corona de oro de 18 kilates.
Este reloj es una pieza única que se suma a las propuestas de alta relojería con su nombre, y su fabricación es tan sorprendente que ahora se exhibe en el Museo Nacional de Antropología e Historia de la Ciudad de México.
Cabe destacar que no es la primera vez que México es fuente de inspiración para la relojería suiza, pues otras compañías como Hublot, Girard-Perregaux, Ernst Benz, Romain Jerome, Montblanc, entre otras, han materializado diversos accesorios inspirados en la riqueza histórica, cultural y natural de nuestro país.
Mucho de lo anterior se debe a que la marca México por muchos años ha representado la tradición y modernidad de las costumbres del país, y eso a su vez ha contribuido a generar un impacto positivo en la captación de inversión, la llegada de visitantes, pero sobre todo la forma en la que nos percibe el mundo.
En ese sentido, se ha presentado un México con una visión vanguardista que resalta las costumbres, experiencias y patrimonio cultural, con 121 pueblos mágicos, las mejores playas, 11 mil kilómetros de litoral, las fiestas indígenas, entre otros atractivos.
Simbología
El dial presume la Piedra del Sol, una legendaria pieza azteca que es una de las obras más conocidas e icónicas de la civilización. Éste también comprende ocho círculos concéntricos, cada uno con una gran cantidad de referencias a la cosmogonía azteca.
Debajo del segundo círculo concéntrico de la Piedra del Sol, Louis Moinet decidió incorporar un segundo aerolito: el meteorito de Toluca, con un tratamiento azul aplicado para hacerlo lucir en todo su esplendor.
En particular, el segundo círculo sobresale por los símbolos de los dioses Ehécatl, Tezcatlipoca, Tláloc y Chalchiuhtlicue, y evoca la leyenda de los soles, mito cosmogónico basado en la creación y la destrucción de varios mundos sucesivos.
Raíces precolombinas
Este accesorio también tiene grabados inspirados en la arquitectura típica de la ciudad precolombina de Mitla, ocupada por los zapotecas.
La silueta del reloj es producto de la combinación de un conjunto de tecnologías inéditas, pensadas en torno a dos puentes horizontales que cruzan la pieza, en cuyas asas se insertan los dos extremos de la pulsera.
Además, las asas rinden homenaje a la deidad maya Chaahk, dios de la lluvia y protector de las cosechas, y se puede observar en ellas el Palacio de Máscaras de Yucatán, también conocido como Codz Poop
Es increíble que esta pieza además de única sea un objeto muy especial que une al conocimiento astronómico de nuestros antepasados con el conocimiento actual del savoir-faire relojero.
Al final…
Es muy interesante que las industrias no sólo se centren en producir artículos masivos para su comercialización. Este reloj es un claro ejemplo de que cualquier producto puede integrar a sus líneas las raíces, tradiciones, cultura e historia de un país y acercarlo a su consumidor objetivo a través del arte. Una estrategia muy inteligente.
