Cuando la pandemia llegó, la banca en línea o electrónica ya estaba ahí, y la emergencia sanitaria catapultó su aprovechamiento.
Ninguna campaña de publicidad sobre educación financiera digital o promoción bancaria por sí sola, logró tanto éxito en el incremento de usuarios de banca digital como el microscópico coronavirus que asola a la humanidad.
Es la era del internet y 57 por ciento de la población mundial está conectada a la red, sobre todo, por la accesibilidad que dan los teléfonos celulares inteligentes.
El entretenimiento había sido el principal uso de los smartphones, mientras los servicios financieros digitales habían sido desaprovechados por la mayoría, a menudo por desconfianza, pero también por la falta de dinero.
Sin embargo, el confinamiento obligó a miles de personas a incursionar en el uso de aplicaciones o plataformas bancarias y financieras para comprar productos, pagar servicios, realizar transferencias y hasta hacer inversiones.
Uno de cada 10 consumidores utilizó por primera vez una plataforma digital debido al encierro que impuso el Covid-19. Y una de cada 5 personas, de 18 a 44 años, comenzó a hacer sus transacciones bancarias exclusivamente on line, según una encuesta de ESET, una empresa global de seguridad en internet.
Eso se traduce en millones de nuevos usuarios de banca móvil o banca en línea.
Sea monedero electrónico, billetera virtual o aplicaciones bancarias y para la gestión de las finanzas personales, las aplicaciones o plataformas financieras ya son utilizadas por 6 de cada 10 consumidores en el mundo.
No hace mucho, apenas en 2018, en México 68 por ciento de la población adulta ya contaba con algún producto financiero, pero únicamente la mitad de quienes tenían celular en ese momento poseía una cuenta en un banco o institución financiera.
De cada 10 clientes bancarios, 8 no tenían banca en línea porque preferían usar el cajero, acudir a la sucursal bancaria o, en todo caso, recurrir al internet en casa u oficina, según la última encuesta sobre inclusión financiera del Inegi.
¿QUIÉN GANÓ MÁS CLIENTES DIGITALES?
La competencia para ganar más clientes, con sus respectivas campañas publicitarias y mercadológicas, así como las mejoras en la funcionalidad y seguridad de sus respectivos servicios, ha sido una constante desde hace años entre las instituciones financieras.
En esta contingencia, los bancos digitales o Fintech que ganaron más clientes con sus aplicaciones fueron aquellos que ya tenían cimientos en ese camino y estaban preparados tecnológica y publicitariamente para expandir su participación de mercado.
En México, los principales bancos lograron subir su cartera de clientes digitales y móviles en más de 25 por ciento, según datos de la Asociación de Bancos de México (ABM). Las transacciones y compras en línea subieron aún más, de 40 a 100 por ciento, según el banco del que se trate.
BBVA, por ejemplo, cerró 2020 concentrando 23 por ciento en la captación bancaria de México y el número de clientes que utiliza su aplicación móvil creció 26 por ciento en el año, al superar los 10 millones de usuarios, casi la mitad de todos sus clientes. Las transacciones en línea, por computadora o celular se dispararon en más del 50 por ciento.
Es un avance enorme si se considera que la banca móvil era de uso limitado y en 2015 sólo recurrían a ella 9.5 por ciento de los usuarios financieros en México.
A nivel global, según la investigación de ESET, un 57 por ciento de la población ya utiliza banca móvil o en línea más que antes y 58 por ciento confía en que su dinero y cuentas están seguros al utilizar los monederos digitales.
La confianza en las transacciones en línea llega a tal grado que un 30 por ciento de los encuestados se consideran usuarios avanzados en las inversiones en criptomonedas, esa divisa o moneda virtual desconocida para la mayoría.
¿Y tú? ¿Ya dejaste de ir al banco? ¿Realizas transacciones con tu celular? Cuéntanos.