¿Hacia dónde apuntamos cuando decimos que queremos mejorar nuestra comunicación de marca? Particularmente, creo que todo se traduce en saber dirigirnos de forma adecuada a nuestros públicos, para poder potenciar nuestras ventas.
Hay dos temas a tener en cuenta para lograrlo: LA NECESIDAD Y EL DESEO DE NUESTROS CLIENTES. A través del análisis de mercado, estudiamos lo que el cliente necesita y nos ajustamos con nuestro producto o servicio a satisfacerlo.
Ahora bien, por lo general los emprendimientos pequeños se inician teniendo un producto/servicio y luego comunicándolo para vender. Entonces, en esos casos, hay que pensar a la inversa: en vez de considerar qué necesita el cliente y elaborarlo para vendérselo, la lógica es: ¿cómo y a quién mi producto/servicio satisface? ¿Y cómo lo comunico?
Esto nos permitirá poder posicionarlo de la mejor manera, sabiendo:
– La necesidad o deseo de la persona: qué quiere y busca cuando desea adquirir lo que ofrecemos. Por ejemplo, si vendo indumentaria, pensar que el cliente quizá quiera sentirse cómodo, elegante, a la moda, o simplemente que cumpla la función de abrigarlo.
- Público objetivo: Hay que segmentar y encontrar al nicho al que va dirigido, cuanto más específico mejor. A quién le voy a vender, edad, estilo de vida, locación de uso, cultura.
- Percepción de valor: Lo que el cliente esta dispuesto a pagar por ese producto o servicio. La calidad, el estatus, el reconocimiento, etc.
Si bien a un mismo cliente, podemos hablarle de diferentes maneras, por ejemplo enfocándonos en el uso del producto/servicio, o en tentarlo con el status que le otorgará comprarnos, encontrar cuál es el tono, nos va a permitir profundizar en la estrategia y va a generar muchas más oportunidades.
Ni hablar del engagement, que será ampliamente superior. Esto en última instancia, podrá lograr la tan ansiada comunidad en torno a la marca.
Muchas veces, las necesidades o los deseos no existen… en estos casos, ¿qué hacer? Podemos pensar en BENEFICIOS: si el cliente compra el producto o servicio, logrará por ejemplo status social. Inconscientemente, le estamos instalando una necesidad. No la creamos, sólo la instalamos en su mente.
Ahora sí, te invito a encontrar la forma de comunicar tus virtudes de marca para lograr más ventas.
Por último, pero no menos importante, siempre recordá que podés contratar asesores de marketing y comunicación para que este trabajo, si te cuesta, sea mucho más sencillo. ¡Siempre es mejor con expertos!
Espero que este post te haya ayudado, y me encantaría escuchar si te sirvió para mejorar. Dejame tu comentario, ¡hasta la próxima!