Internet es un baúl de recuerdos infinito: aquello que publicamos siempre se quedará en Internet. Por lo tanto, si queremos que nuestro contenido web siga generando tráfico y nos nos penalice con el tiempo, tenemos que asegurarnos de que siga siendo relevante.
La única forma de hacerlo es actualizando nuestros contenidos. Así seguirán aportando valor y generando visitas.
Es cierto que crear nuevo contenido web suele ser más apetecible que revisar permanentemente lo ya revisado pero, según una encuesta de SEMrush, el 51% de las empresas afirman que actualizar el contenido existente es la táctica más eficiente.
Por este motivo, no se debe ignorar la actualización periódica de los contenidos. Y, además, cuanto más actualices tu sitio web o tu blog, más le gustarás a Google, punto clave para tu posicionamiento SEO.
Ahora que tenemos claro por qué es importante actualizar tu contenido web, vamos a ver qué pasos seguir:
- Identifica los artículos o blog post con más éxito
- Simplifica el contenido
- Cambia sí o sí la introducción y la conclusión
- Añade más palabras clave
- Añade imágenes
- Vuelve a promocionar el contenido
Identifica el contenido web con más éxito y utilízalo
Como en todas las tareas, primero tenemos que priorizar. Por ello, te aconsejo que primero actualices los artículos más populares.
Para identificarlos, la analítica es clave. En este caso, revisa las estadísticas de tráfico en Google Analytics.
Es muy sencillo. Debes ir a: Behavior > Site Content > All pages.
Tras identificar estos blog post, debemos modificarlos e incluir links a otros blog posts o páginas de nuestra web para conseguir que tengan un mayor tráfico.
Simplifica el contenido
Si queremos impactar en nuestra audiencia, simplificar es clave, tal y como afirman siempre “los del volcán” (agencia de comunicación).
Debemos ponérselo fácil al que visita nuestro artículo para conseguir que se quede. Esto lo conseguimos mediante una comunicación clara y directa. Además, esto también ayuda a mejorar la legibilidad en dispositivos móviles.
Tenemos que:
- Dividir los párrafos para que no sean demasiado largos.
- Estructurar con listas.
- Eliminar adornos y palabras que no aportan nada y que pueden confundir
- Hacer las frases más cortas.
Cambia sí o sí la introducción y la conclusión
¿A qué prestamos más atención cuando consumimos contenidos? Introducción y conclusión o final.
Modifica tu introducción y tu conclusión con nuevos datos, con algún elemento de actualidad, con un nuevo CTA (Call To Action), etc. Esto aportará frescura al artículo a pesar de que lo hayas creado hace 6 meses.
Sin embargo, algo que NUNCA debes cambiar es la URL de la página. Así siempre conservarás la autoridad que ya haya conseguido hasta el momento y no perderás los backlinks que haya podido generar.
Añade más palabras clave
Todo evoluciona. Las búsquedas en Google, también.
Es probable que con el tiempo se busqué la misma información mediante nuevas palabras clave. Debes identificar estas nuevas palabras clave e introducirlas en tu artículo para que siga siendo relevante.
Además, repetir una palabra clave a lo largo del texto está muy bien. Pero, no te olvides de emplear sinónimos, porque siempre puede haber personas que utilicen estos sinónimos en sus búsquedas.
Si esto te resulta complejo tanto Hubspot, como SEMrush tienen funcionalidades para ayudarte a buscar las palabras clave adecuadas para cada contenido.
Añade imágenes
Cada vez que hay una imagen, captamos la atención. ¿No te parece?
Una imagen da aire a la lectura, es un descanso para los ojos y un elemento que atrae la atención. Por eso te recomiendo incluir elementos visuales en tu contenido.
Existen muchísimas bibliotecas de imágenes libres de derechos, como Freepik. Otra opción es utilizar fotos propias.
Vuelve a promocionar el contenido
Tras publicar el contenido actualizado, es momento de añadirlo al calendario de redes sociales para promocionarlo. También podemos moverlo a través de newsletters o mailings que enviemos, etc.
La idea es hacer que el contenido “viva”, que el tráfico crezca y que sirva para algo el trabajo realizado.