El Oxxo y yo #JuntosPodemos

¿Quién ha escuchado o leído la frase #JuntosPodemos?, la cual se ha convertido más bien en un cliché barato que en algo profundo, sentido, solidario y materializado, podría asegurar que todos y no solo eso, muchos de nosotros lo escribimos en nuestras publicaciones con el afán de mostrar que … ¿qué?.

Hace unos días estaba por entrar al oxxo y en la puerta había un letrero que decía “juntos podemos”, lo primero que pasó por mi cabeza fue “qué chido, están apoyando” y segundos después me pregunté ¿Cuál es el apoyo que ofrecen?,¿Qué hacen realmente por los demás, además de vender? ¿Cómo es su manera de ayudar?, ¿Cuándo practican ese “juntos”?, ¿Regala agua, latas de atún o galletas a las personas que han caminado cuadras enteras buscando trabajo?, ¿le da comida a los perritos que están en la puerta de entrada?, fuera de los programas disfrazados de ayuda como el redondeo, qué hacen?. No encontré testimonios de personas que hayan salido beneficiadas por su “juntos podemos”, busqué y busqué en internet para entender o conocer cómo lo sustentan, pero me di cuenta que era como una publicación vacía de las tantas que circulan, y fuera de los memes que hay del oxxo no encontré más.

Pero bueno, mi reflexión no quedó ahí, después de mi investigación y enojarme con ellos por “hipócritas” y usar frases que realmente (o aparentemente) no practican, quise ir un poco más allá, desde hace muchos años procuro encontrar mensajes hasta en lo más trivial que hay en mi día, todo lo que sucede tiene mi propia interpretación y no necesariamente coincide con lo que es o se quiere dar a entender, entonces después de unos momentos tratando de asimilar el “famoso mensaje que hay para mi” (no se rían), me di cuenta que yo hacía exactamente lo mismo, mis publicaciones estaban plagadas de “apoyo”, el mismo que ofrecía desde mi lap, con un hashtag y fotos con algunos filtros para verme un poquito mejor, ¡madres! se me caía la cara de vergüenza, no había ninguna diferencia entre ellos y yo, incluso ni siquiera era justificable que ellos tienen grandes ganancias para realmente hacer programas de ayuda solidaria, esto no se trataba de dinero, de ganancias o de posición social, se trataba de mi propia incongruencia, empecé a sentir un golpe en el estómago, el enojo hacia el oxxo se fue desvaneciendo, la crítica implacable que emití también desaparecía, ya no se trataba de ellos, sino de mi junto con mi incongruente y deficiente solidaridad.

Canal de Soy.Marketing en WhatsApp

Les juro que estuve un buen rato reflexionando a cerca del tema, porque de corazón desde hace tiempo tengo la intención de ayudar y creo fervientemente en el “juntos podemos”, empecé a observar publicaciones de otra personas, negocios, servicios, y la mayoría usaba es mismo cliché, se había convertido en una moda “ser solidario de sillón”, me di cuenta que la mayoría está ensimismada, y su acto empático es un manoseado hashtag. 

¿Saben qué? La mera verdad creo que no nos damos cuenta de lo que hacemos y en realidad no sabemos ni por dónde empezar para ayudar, sumar y hacer equipo con otros porque en el fondo lo que verdaderamente importa es los que necesitamos nosotros, nos hemos hecho egoístas, nerviosos, preocupados por destacar y crecer de manera vertical, cuando se requiere expandirnos de forma horizontal, no se trata de competir sino de compartir, así que nuestra experiencia, conocimientos, capacidades, talentos y todo lo que nos conforma como seres humanos es para servir a los demás y no solo a nosotros mismos, y nada tiene que ver con dejarnos a un lado o no ser nuestra prioridad, pero siempre hay algo que podemos ofrecer por el gusto de compartir. 

Finalmente con un poco de culpa entendí que la verdadera solidaridad no se escribe, se vive y terminé haciendo las paces con mi amiguito Oxxo, porque quizá igual que a mí me pasó, no se ha dado cuenta que el apoyo es con hechos y ¿quién sabe no?, en una de esas hacen cosas fantásticas y yo estoy aquí de habliche, vete tú a saber…

TAGS:

COMPARTIR ARTÍCULO

Facebook
Twitter
Telegram
WhatsApp

DEJAR UN COMENTARIO

Deja un comentario

ARTÍCULOS RELACIONADOS