“No hay nada nuevo bajo el sol”, “siempre lo hemos hecho así”, “eso es imposible”, “esa idea está adelantada a su tiempo”, “no es seguro y vamos a perder dinero”, “ya hicimos algo parecido y no funcionó” son algunas de las tantas frases trilladas a las que recurrimos cuando pensamos que ya todo está dicho, hecho o pensado, y que por tanto no se puede ser creativo e innovar en el mundo de los negocios.

Ser emprendedor es una profesión de alto riesgo que requiere tener una alta dosis de tolerancia a la frustración, porque detrás de una idea millonaria existe un recuento de muchos fracasos, caídas, pruebas y riesgos, que precisan de cierta necedad para no darse por vencido y continuar en el intento, aunque todo el mundo piense que estamos equivocados. Sin duda el ingrediente más importante que se requiere para emprender cualquier negocio es la creatividad, pues es lo que posibilita generar valor de marca al desarrollar soluciones innovadoras como respuesta a los problemas complejos de la vida de las personas.

¿El creativo nace o se hace?

Sin duda hay personas que ya nacen con cierta habilidad para pensar fuera de la caja, imaginar cosas que no existen o ingeniárselas para resolver algo de una manera original o poco convencional, pero también es una realidad que podemos aprender a desarrollarla a través de métodos de ideación.

Una de las metodologías más destacadas centradas en la innovación, es Design Thinking, creada en la Universidad de Stanford, misma que emplea formas disruptivas para solucionar problemas a través de un proceso de ideación al que llaman “asociación forzada”, el cual consiste en forzar a nuestra mente para conectar dos conceptos que parecieran no tener relación alguna para estimular la imaginación.

¿Cómo aplicar la asociación forzada?

La asociación forzada plantea que, durante un proceso creativo en grupo, cada persona escriba 5 papelitos con nombres de marcas o celebridades famosas, por ejemplo: Batman, Elon Musk, Nike, Disney y Shakespeare, las coloquen en un frasco, posteriormente cada integrante al azar saca uno de esos nombres para plantearse la pregunta: ¿Cómo resolvería Batman esta situación o problema?

Durante mi certificación en Design Thinking, en este ejercicio de asociación forzada, me tocó el dilema: ¿Cómo haría McDonald´s para que las personas afiliados al IMSS en México asistan a hacerse estudios preventivos?

Mi primera respuesta operó desde la negación, la imposibilidad, el bloqueo y la frustración, pero después empecé a conectar los puntos en mi mente y entonces imaginé: ¿qué está haciendo McDonald´s para atender a sus clientes en la actualidad?, vinieron a mi cabeza las nuevas pantallas digitales que usan para que las personas seleccionen sus alimentos y de esta manera eficientar y personalizar la experiencia de sus clientes, fue así como tuve mi momento de revelación (el llamado momento Eureka o Aha Moment) y concebí una idea divergente que consistía en colocar pantallas en las salas de espera del IMSS que contengan la imagen de un cuerpo humano, en el que los pacientes puedan señalar en qué parte del cuerpo sienten dolor, ingresar sus datos generales y biomédicos, así como su historia clínica para hacer un expediente universal más efectivo que permita economizar el tiempo que tarda el médico al recabar dicha información con cada paciente, lo que reduciría el tiempo de retraso y se aprovecharían los momentos que pasan las personas en la sala de espera.

Jamás hubiera pasado por mi mente esta idea, sin que la asociación forzada con McDonald´s se hiciera presente, hoy comprendo que todos podemos ser creativos, pero para ello es fundamental dejar de lado las creencias limitantes, y confiar en que, ante la capacidad de la mente humana, la palabra imposible no existe.

En conclusión, si deseas emprender un negocio, es preciso desbloquear tu mente, ampliar tu criterio y atreverte a crear lo que antes no existía, para saber más, te recomiendo igualmente leer el artículo: Innovación en la perma-crisis ¿Cómo aprovechar la creatividad en tiempos difíciles? https://soy.marketing/innovacion-en-la-perma-crisis-como-aprovechar-la-creatividad-en-tiempos-dificiles/

Me despido con la frase de Henry Ford, impulsor de la industria automotriz, quien afirmaba: “Si hubiera preguntado a la gente qué querían, me habrían dicho que un caballo más rápido”.

¡Hasta la próxima!