La generación Z nació en la era digital, por lo que su vida gira alrededor de dispositivos móviles, consolas, celulares, internet y redes sociales. Las marcas han tenido que cambiar sus estrategias publicitarias para poder llegar a esta generación que no suele consultar revistas, ver programas de televisión o escuchar la radio, a veces ni siquiera ponen mucha atención a la publicidad impresa en las calles.
Son un público muy fuerte como consumidor, por lo que si logras llamar su atención podrás obtener beneficios. Para lograrlo se suele hacer uso de los llamados influencers porque cuentan con cierto poder en las redes sociales, característica que les sirve a las marcas.
Los influencers establecen una comunicación más relajada y personal con su público y, por lo tanto, su audiencia tiende a confiar más en ellos. Estos aparentan ser personas comunes y corrientes, como todos nosotros, y podemos sentir cierta cercanía y afinidad con ellos.
La publicidad con los influencers puede ser pagada o por colaboración. Si es pagada se puede acordar un contrato y tiempo estipulado, si es por colaboración las marcas pueden enviar algunos de sus productos como paquetes de Relaciones Públicas (PR) para que esa persona pueda probarlos y dar su respectiva reseña a través de sus redes sociales.
Cuando son colaboraciones la audiencia suele confiar más porque piensa que la opinión del influencer respecto a la marca es más real, ya que al no estar comprometidos por un contrato pueden expresarse más libremente y con mayor sinceridad.
En ocasiones suele ser complicado distinguir cuando es publicidad pagada o cuando no, ya que no todos los influencers suelen dar esa información a su público. Esto último ya se está regulando por ley, así los influencers estarían obligados a informar cuando su participación está vinculada a una campaña pagada.
En mi experiencia, las colaboraciones que hacen las marcas con los influencers por medio de sus paquetes de Relaciones Públicas (PR) generan mayor confianza y puedo disfrutar de la experiencia con el producto como si yo fuera “amiga” del influencer en cuestión.
En el caso del maquillaje, por ejemplo, puedo experimentar a distancia cómo reaccionó el influencer al abrir el producto o cómo funciona el producto en su piel, entre otros aspectos. Así puedo sacar mis propias conclusiones en cuanto a mis gustos y necesidades.
Creo que es muy importante planear una buena campaña de publicidad con influencers ya que en algunos casos puede no funcionar como se esperaba, por ejemplo, puede verse muy forzado o tal vez el influencer recomiende algo que ni siquiera sabe si funciona o no, pero lo hace porque es pagado.
Hace poco la marca de cosméticos KVD Beauty sacó un nuevo producto que algunos influencers recomendaban en exceso y se hizo viral en TikTok. Sin embargo, cuando algunas personas probaron el producto, este no cumplía con todas las expectativas que se habían formado.
Algunos puntos a considerar para una buena campaña con influencers son:
- Identificar el target de tu producto o servicio.
- Establecer qué características quiere resaltar la marca.
- Elegir la red social adecuada.
- Seleccionar influencers que realmente conecten con su audiencia.
- Analizar el perfil del influencer seleccionado (su contenido, número de seguidores, engagement, cómo son sus seguidores, cómo es la relación entre ellos, segmentación del mercado, FODA).
- Definir tono y modo de comunicación.
- Ser transparente con la audiencia, es decir, decir explícitamente si se trata de algo pagado o es una colaboración por PR.
- Hacer pruebas.
- Analizar y medir todas las reacciones y resultados.
- Hacer modificaciones de ser necesario y tomar una decisión de campaña.
En la actualidad, las redes sociales que han tomado mucha más fuerza entre la generación Z son TikTok e Instagram porque los videos cortos o reels son de su agrado, van al grano y facilitan la toma de decisiones.
Estos vídeos se pueden dividir en secciones para hacerlos más breves, pero el primero deber estar muy bien planeado para atrapar a la audiencia. Deben ser muy dinámicos, creativos y muy innovadores, también se puede aplicar lo que esté en tendencia para que así el algoritmo haga su trabajo.
Desde mi punto de vista, recomiendo que se tomen decisiones inteligentes al confiar cualquier marca a los influencers. También es básico no quedarse con una sola opinión, sino buscar en otros influencers otros puntos de vista para así poder comparar mejor las diferentes perspectivas y adecuarlas a lo que se necesita.
Por último, lo que le sirve a una marca puede que no le sirva a otra, no porque el producto sea malo, simplemente por sus diferencias, y hay que buscar lo que sea mejor para cada marca y no aferrarnos a lo que es viral o está de moda, debemos elegir inteligentemente.
Por: América Contreras Morales – estudiante del 11° semestre en la Licenciatura en Diseño y Producción Publicitaria de UPAEP – Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla.