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Queridos Reyes Magos:
Este año he sido un publirrelacionista responsable, y después de muchas noches de desvelo, manejo de crisis y eventos impecables, les dejo esta lista de deseos para el 2025. ¡Cada uno viene con su explicación para que sepan por qué son tan importantes!
- Menos crisis sorpresa y más planes bien estructurados.
Sería genial que los imprevistos no llegaran cuando estamos a punto de dormir o un domingo por la mañana. Si todas las estrategias pudieran desarrollarse con suficiente planificación y anticipación, se reduciría el estrés y tendríamos más margen para ser creativos y efectivos. ¡Un poco de estabilidad nunca viene mal! - Que las empresas comprendan que las relaciones públicas son una inversión y no un gasto.
Las RRPP construyen confianza, reputación y credibilidad a largo plazo. No es un lujo, es una necesidad. Si las empresas entendieran esto, habría más proyectos valiosos y menos recortes repentinos en los presupuestos. - Un aumento generoso en los presupuestos de RRPP.
La creatividad necesita recursos para brillar. Muchas veces trabajamos con presupuestos mínimos y aún así logramos milagros. Imaginen lo que podríamos lograr con más inversión: mejores campañas, más alcance y resultados más impactantes. - Más eventos presenciales llenos de energía, pero con opciones híbridas.
Los eventos presenciales son insustituibles para crear conexiones genuinas, pero los formatos híbridos permiten que más personas participen sin importar su ubicación. ¡Lo mejor de ambos mundos! - Ruedas de prensa dinámicas y entretenidas.
Basta de monólogos interminables y salas aburridas. Queremos presentaciones innovadoras, interactivas y que capturen la atención de los asistentes. Que las ruedas de prensa sean una experiencia y no una obligación. - Clientes que digan: “Confío en tu creatividad, haz lo tuyo”.
No hay mejor sensación que cuando un cliente confía en tu experiencia y te da libertad creativa. Permite desarrollar proyectos auténticos, innovadores y mucho más efectivos. - Que las notas de prensa no terminen en el basurero digital.
Cada nota de prensa que enviamos tiene detrás investigación, redacción cuidada y un propósito claro. Si logramos enviar el mensaje adecuado a las personas correctas, podremos evitar que nuestras notas sean ignoradas. - Más líderes auténticos y transparentes.
Necesitamos líderes que comuniquen con honestidad y sean el ejemplo de lo que predican. La transparencia es clave para mantener una reputación sólida y para inspirar a los equipos y al público. - Que el protocolo deje de ser visto como algo rígido y aburrido.
El protocolo es una herramienta valiosa para dar orden, respeto y estructura a los eventos. Si se aplica correctamente, puede ser una experiencia fluida y positiva. ¡No tiene por qué ser sinónimo de rigidez! - Periodistas que respondan los correos y no desaparezcan como por arte de magia.
Entendemos que tienen agendas llenas, pero un simple “Recibido” nos da paz mental y nos ayuda a mejorar nuestra comunicación. ¡La colaboración entre periodistas y publirrelacionistas es clave! - Más empatía entre colegas y menos egos en las juntas.
Cuando trabajamos en equipo y dejamos los egos fuera, los proyectos fluyen mejor y el ambiente de trabajo mejora. Todos sumamos con nuestras ideas y talentos. - Clientes y jefes que digan “gracias”.
Un reconocimiento sincero puede ser más motivador que cualquier bono. Saber que valoran nuestro esfuerzo y dedicación hace que todo valga la pena. - Influencers que realmente encajen con los valores de las marcas.
Queremos colaboraciones auténticas, donde los influencers conecten de verdad con el mensaje de la marca y no solo por el cheque. La coherencia es clave para que una campaña funcione. - Historias humanas y genuinas en lugar de mensajes acartonados.
La gente se conecta con personas y emociones, no con comunicados impersonales. Necesitamos contar historias que inspiren, emocionen y resuenen con la audiencia. - Campañas de comunicación interna que realmente inspiren.
La comunicación interna no debería ser una lista de tareas o recordatorios aburridos. Debe ser una fuente de inspiración y motivación para los equipos. - Un equilibrio entre vida laboral y personal.
Trabajar en RP a veces significa estar disponibles 24/7, pero también necesitamos descansar para recargar energía. ¡Un poco de equilibrio nos hace más creativos y productivos! - Que el storytelling siga siendo poderoso, pero siempre honesto.
Queremos contar historias que sean interesantes y emocionantes, pero también auténticas. Nada de engañar a la audiencia con cuentos vacíos. - Más networking real y menos intercambio forzado de tarjetas.
Las mejores conexiones nacen de conversaciones genuinas y no solo de intercambiar datos de contacto. ¡Más calidad y menos cantidad en el networking! - Que cada evento y campaña nos recuerden por qué amamos esta profesión.
A veces el ritmo puede ser abrumador, pero cuando todo sale bien y logramos conectar con la gente, recordamos por qué nos apasiona tanto lo que hacemos. - Más creatividad, ética y estrategia en cada proyecto.
La fórmula perfecta para el éxito en RP: ser creativos, actuar con ética y tener una estrategia clara. ¡Si mantenemos estos pilares, nada puede salir mal!
Les prometo que si cumplen estos deseos, el 2025 será un año espectacular para las relaciones públicas. ¡Y sí, también les dejaré galletas extra junto a los zapatos!
Con mucho cariño,
Un publirrelacionista con muchas esperanzas
Felipe Reyes Barragan
Whatsapp (52) 477 4499216
