¿Te imaginas un mundo digital sin cookies? Hace unos meses los profesionales del marketing no imaginaron que se avecinaría el final de las famosas cookies.
Era impensable creer que esto ocurriría. Cada vez que un usuario abre una página de internet aparece un mensaje para autorizar el uso de cookies, lo que permite analizar la ruta de navegación que la persona hace y así las marcas poder ofrecer productos mucho más personalizados, según la búsqueda previa que realizan.
Sin embargo, las cookies tienen un lado débil: la invasión a la privacidad. Tanto los anuncios en exceso como el abuso de estas cookies digitales son invasivas para los usuarios y hay quienes prefieren pagar con tal de dejar de ver publicidad.
Lo anterior ya lo había previsto Kantar, empresa especialista en consultoría e insights basados en evidencias en su estudio de Predicciones 2020. 
Buscadores como Google han dado la opción al usuario de elegir si desea aceptar las cookies o no. Los usuarios agradecen no sentirse vigilados en su ruta de navegación pero para los profesionales del marketing esto es una pesadilla, pues sin observación, no hay entendimiento de qué ofrecerle al consumidor.
Ante esta preocupación llegó Moonshot, la primera plataforma independiente más avanzada para medir la efectividad de un anuncio, así como el seguimiento a los comportamientos del usuario, sin invadir la privacidad de los usuarios.
El uso de Moonshot se convierte en un aliado estratégico para conocer mejor al consumidor potencial y cautivo, permitiendo establecer integraciones de datos.
A través de esta herramienta, todos los mercadólogos pueden evaluar el impacto de la publicidad de la marca. Y apalancarse de una plataforma de datos y tecnología de próxima generación que cumple con la privacidad para migrar la industria de la medición, basada en cookies a las integraciones directas del publisher, dentro de un plan de medios que incluye soluciones de sondeo para entornos de walled garden y campañas cruzadas de publishers.
Al momento, el 40% de los anunciantes confía en la medición sin cookies. Un porcentaje que, conforme a la predicción de Kantar, irá creciendo en lo que resta del año, mientras que la eliminación de las cookies se seguirá dando de forma gradual.
