A pesar de toda a revolución de negocios nuevos en nuestra época, la investigación de mercados sigue y seguirá siendo un buen recurso para validar y/o generar estrategia(s). No es para nada un pretexto para no tomar un riesgo, sino una manera de generar un planteamiento exitoso de manera oportuna y asegurarnos de implementarlo de la forma más conveniente posible.
Según el financiero y fuentes relacionadas con organizaciones como la AMEXCAP (1) en México el 75% de las “startups” cierran operaciones dentro del 2do año de existencia, mucho se debe a la falta de recursos que los lleva a no mantenerse en funcionamiento pero de acuerdo a investigaciones del Instituto de Emprendimiento Eugenio Garza Lagüera el 43% de esas empresas fracasan por un error en su hipótesis o entendimiento de las oportunidades del mercado y la forma de abordarlo y/o ejecutarlo.
Así como habemos muchas personas convencidas de realizar “Market Research”, de alguna manera, uno de los mayores influenciadores en contra de la investigación resulta ser uno de los mayores genios de la innovación: Streve Jobs, quien consideraba que preguntarle a sus clientes/usuarios no era lo mejor por hacer debido a que “no sabían lo que querían”, sin embargo algo que él hacía muy bien era aterrizar y simplificar los procesos para facilitar el uso de la tecnología. Eso es entender lo que el usuario quiere y eso se transforma en un “insight” muy poderoso, así también el mismo Jobs tuvo proyectos inconclusos, los cuales nunca salieron al mercado y que costaron a su empresa, cientos de miles de dólares.
Estas consideraciones me llevan a pensar que realizar una buena investigación de mercado antes de un lanzamiento importante, para realizar hallazgos nuevos y/o detectar “insights” de los consumidores o simplemente conocer tu segmento o mercado, no es nunca una mala idea. Para las personas “mortales” como nosotros, y con presupuestos muy diferentes a los de Jobs, minimizar riesgos y tener planes bien aterrizados constituye la base para cualquier negocio exitoso. Así que aquí te doy unos cuantos puntos que te ayudarán a definir si tu idea, producto, lanzamiento requieren de investigación de mercados, ya sea cualitativa, cuantitativa o ambas:
- Cuando no sabes de qué tamaño es tu mercado potencial, es muy importante que consigas información que te ayude a definirlo. (cuantitativo)
- Cuando no puedes responder a quién va dirigido tu proyecto, producto. (cualitativo)
- Cuando tus objetivos de crecimiento y ganancia no son claros en diferentes niveles (volumen, precio, tipo de clientes). (mixto)
- Cuando tu idea no ha sido probada en nadie más que en tus conocidos cercanos. (eso sí realiza tus registros de marca y patentes de ser necesario antes de extender tus conceptos a alguien más). (cualitativo)
- Cuando tu proyecto es absolutamente innovador debes probarlo de manera local, antes que regional y nacional e ir expandiéndote poco a poco. Ese inicio local es en sí un evento que te permitirá ajustar y sirve como una investigación de campo.
- Cuando tienes dudas acerca de la mejor forma para ejecutarlo. (cualitativo)
- Cuando la imagen del producto no está totalmente definida o no sabes qué camino tomar con base en tus consumidores/clientes. (cualitativo)
- Cuando no has definido un nombre de marca poderosa, vale la pena escuchar a los que podrían comprar tu producto. (cualitativo)
Hay muchas más razones por las cuales vale la pena realizar una investigación de mercado. Entender que es una herramienta con la cual puedes validar y/o generar estrategia es absolutamente relevante y nunca pasará de moda. Si quieres conocer más acerca del concepto de El Insight puedes leer mi artículo acerca de ese tema.
¿Qué opinas? Dame tus comentarios.
(1) La Asociación Mexicana de Capital Privado, A.C