Las empresas automotrices saben que van contra reloj en la meta para reducir las emisiones de C02, y permitir que los gobiernos alcancen los objetivos de Desarrollo Sostenible.
Por eso sus áreas de innovación e investigación están volcadas hacia el desarrollo de automotores eléctricos, desde donde ya ha comenzado una nueva era para el sector y la competencia entre las marcas que lo conforman.
Por esa razón, no es extraño que, en estos días, desde Volkswagen (VW), se filtrará la información de que la firma alemana adoptará el nombre de Voltswagen, para impulsar la transición hacia un futuro de automotores eléctricos, y lanzarse de lleno a competir en este mercado, dominado por Tesla.
Aunque la noticia corrió como rumor, y la empresa apareció y desapreció un comunicado anunciando el cambio de nombre, la confirmación vino en el transcurso del martes 30 de marzo en sus redes sociales.
La firma automotora escribió un tuit en el que refiere que, aunque tener 66 años no es la edad ideal para cambiar de nombre, con su corazón siempre joven, presentaba a Voltswagen, con un enfoque hacia la producción de autos eléctricos.
En su página www.vw.com/, la portada anuncia justamente la llegada del nuevo Voltswagen ID.4, lanzado en el mercado estadounidense el pasado 16 de marzo.
El cambio de nombre sólo tocará al mercado de Estados Unidos, al menos por ahora. Voltswagen of America sería efectivo a partir del 29 de abril.
Obviamente la empresa sopeso que un cambio de letra en su nombre, la k por la t, más que dañar su imagen y posicionamiento, podría catapultarlo en el mercado de autos eléctricos, pues el nuevo apelativo le viene perfecto a sus planes en este terreno.
De acuerdo con los medios de comunicación que alcanzaron a revisar el comunicado en la propia página de la empresa, antes de que fuera bajado, el logo de la empresa se mantendrá con un color azul oscuro para los vehículos que utilicen motores de combustión, y en el caso de los vehículos eléctricos, se emplearán tonos más claros.
El ID.4
El 16 de marzo Volkswagen lanzó su ID.4, el primer SUV eléctrico “de largo alcance” en Estados Unidos. En el comunicado de lanzamiento de este modelo, la empresa señala que “así como los vehículos eléctricos transformarán la forma en que conducimos, Volkswagen ha renovado la forma en que vende vehículos para abrazar un futuro más sostenible”.
Y es que la empresa automotriz ha puesto especial énfasis en orientar a los compradores en torno a cómo cargar un automóvil eléctrico, hasta qué tipos de incentivos pueden estar disponibles en organizaciones federales, estatales o locales.
Para el líder de desarrollo de concesionarios y estrategia de ventas de vehículos eléctricos de Volkswagen of America, Taylor Olson,
el lanzamiento del ID.4 representa un gran punto de inflexión para la marca y su incursión en el mercado de vehículos eléctricos.
La meta de Volkswagen es lograr que su negocio global sea neutral en carbono para 2050.
“Podemos estar cambiando nuestra ‘k’ por ‘t’, pero lo que no estamos cambiando es el compromiso de esta marca con hacer los mejores vehículos para conductores y personas en todo el mundo”, apuntaba en Scott Keogh, consejero delegado de VW, en el lanzamiento de su ID.4.
En el mercado estadounidense, la firma alemana cuenta en su pasado con un escándalo sobre alteraciones en las mediciones de las emisiones de motores de diésel.
De acuerdo con el informe McKinsey Electric Vehicle IndeX 2020, Tesla es por ahora el mayor vendedor de autos eléctricos, seguido de dos firmas chinas: VYD y BJEV. En la tercera posición se encuentra BMW, cuyos pasos sigue Nissan.
En la posición número seis destaca el desempeño de VW, SAIC y Geely, dos firmas también chinas, se posicionan en el séptimo y octavo lugar. Hyundai en el noveno y Renault en el décimo.
La carrera hacia una transición en la conducción de autos eléctricos promete ser más cruenta en los meses por venir y dar batalla a Tesla, pues ya lo dejaron ver muchas marcas.
En febrero, BMW dijo que su meta es lanzar 25 modelos a nivel global de aquí a 2023.
Mientras que Jaguar Land Rover anunció que a partir de 2025 sus autos serán híbridos o eléctricos, pues dirá adiós a la combustión interna.
La batalla también se dará en el terreno publicitario, y el cambio de nombre de VW en Estados Unidos lo deja claro. Las automotrices están dispuestas a todo por hacerse con la rebanada más grande de este delicioso pastel.
Sin embargo, en México, como en otras naciones latinoamericanas, aún faltan incentivos que permitan una transición más veloz hacia los autos eléctricos, como infraestructura para la recarga o descuentos fiscales, al optar por autos que reducen las emisiones contaminantes.
Por ahora, sólo seremos espectadores de las transiciones aceleradas en otras naciones y podremos opinar libres de culpa. Así que, cuéntanos, ¿consideras acierto desacierto el cambio de nombre de Volkswagen en el mercado estadounidenses?