Es un hecho que no podemos dejar dentro de una estrategia de marketing digital el uso de redes sociales. El no hacerlo, estaríamos perdiendo la gran oportunidad de que la marca pueda alcanzar un segmento muy grande de posibles consumidores. Pero antes de salir a crear uno o varios perfiles de la empresa para cada red social, para cada marca, se necesitan entender un poco de este cambiante y complicado universo. Y, sobre todo, conocer profundamente al público al que nos dirigiremos.
Pensando en eso, vamos a abordar en esta entrega algunos puntos esenciales que se necesita tener en cuenta antes de aventurarse en la utilización de las redes sociales en forma comercial.
1. Los temidos y complejos algoritmos
No vamos a entrar en definiciones técnicas o complejas del concepto. Sólo, y a manera de información básica explicaré lo que son y cómo considerarlos para un buen uso de las redes sociales para la empresa.
¿Imagínate si recibieras todos los contenidos de tus más de 100, 200 o todos, -cualquiera que sea el número- de tus amigos en Facebook? ¿O dedicar tiempo para ver todas las fotos que tus contactos suben en Instagram? Obvio, sería un volumen enorme de información. Por más que quisieras, el tiempo del día no te alcanzaría para revisar y asimilar todo lo publicado en tu timeline. Además, seguramente, te encontrarías en todo momento con contenidos que nada tiene que ver con tu perfil, intereses o simplemente con lo que buscas.
Es aquí, donde empieza el proceso. Instagram, Facebook, YouTube y varias otras plataformas sociales aplican la inteligencia artificial para crear sus algoritmos. Estos consisten en una serie de códigos que funcionan como fórmulas para mostrar a cada usuario lo que les parece –a las redes sociales– interesante para el mismo. Tratan con sus algoritmos selectos de entrega, suprimir “la basura” que la inteligencia artificial detecta inútil para tu perfil o el perfil de la marca.
Y haciendo un paréntesis, necesitamos detenernos en este punto. Los contenidos que se produzcan deben tener relevancia para que pasen esos filtros y sean entregados a tus consumidores en forma orgánica. Si vas a entrar en las redes sociales, necesitas entender lo que a tu público principal le gusta para hacer un contenido de valor, que lo acepte, lo comparta y logre el engagement que se busca. Y más importante, que Instagram, Facebook o YouTube lo consideren relevante para incrementar el SEO orgánico.
2. El lugar correcto, para el consumidor correcto da resultados correctos
Conoce a tu público lo más posible
Parece obvio, pero no lo es. Conocer al público objetivo de la marca es esencial para poder elaborar una estrategia de marketing de contenido asertivo. Hay que conocer con precisión con quien estaremos intentando generar una relación. Conociéndolo, entenderemos sus actitudes, anhelos, deseos y comportamientos. Cada red social tiene sus usuarios. Por ello, que en cada lugar las publicaciones tendrán efectividad si las adaptamos al tipo de seguidores o usuarios que debemos ya conocer. Esta es una de las formas más eficientes de “driblar” los algoritmos: vas a adaptar el contenido de acuerdo con tu público. Con ello, tendrás más posibilidades de aparecer en las redes sociales de quienes te interesan y con lo que ellos quieren ver.
Empieza con el análisis de tus clientes actuales
Si ya está tu marca en el mercado, haz un levantamiento de tus clientes actuales y analiza su perfil. ¿Tienen alguna especie de patrón? ¿Por qué compran tu marca? ¿Cuál es la edad y el sexo predominante? ¿De dónde son ellos? ¿Con qué frecuencia compran tus productos?
Basados en estas reflexiones, podrás evaluar el público de tu interés o si se necesita expandir su campo de actuación. Esta información será esencial para discernir qué tipo de contenido deberás producir.
Por otra parte, si ya tienes información y sabes cuáles son los intereses, el comportamiento y los datos demográficos de tu público objetivo y sabes si tus clientes se interesan más por entretenimiento que noticias de un portal tendrás la pauta de crear contenido de valor.
¿Dónde está tu público objetivo?
Es necesario estudiar a nuestro público objetivo, saber qué es lo que le interesa y cuál es el mejor momento para publicar. Identifica las principales plataformas digitales que tu público utiliza para mantenerse siempre informado con lo que le gusta. Pregúntate: ¿dónde mi público objetivo busca información relevante para lo que deseo ofrecer?
Ya lo mencionamos, el primer paso del éxito en redes sociales es tener contenidos que atraigan. Segundo. Encuentra el momento perfecto y el lugar para colocar estos contenidos. Tercero. Utilizar las herramientas adecuadas como Google Analytics, Facebook Insights, y las tendencias de Twitter, para detectar la dirección correcta de nuestras acciones.
3. Vital el hacer contenidos relevantes
En marketing utilizamos el contenido para lograr posicionarnos como expertos en un determinado sector, para darle a nuestra audiencia un valor que nadie más pueda ofrecer. Para diferenciarnos de los demás. Y, por supuesto, para crear una relación especial con los usuarios. Buscar que usen nuestro contenido para vincularlos emocionalmente con nuestra marca.
Podemos decir qué contenido es todo lo que vemos en todos los medios. La foto de un amigo en el Instagram es contenido. La noticia que la empresa compartió en Facebook también lo es.
Por eso, para destacar a la marca en medio de un mar de contenidos, es importante hacer marketing de contenido. Marketing de contenido significa estrategia, adecuación de temas, conocimiento profundo del público objetivo y medición de resultados. Hacer marketing de contenido no es fácil, pero es posible si se hace profesionalmente y por profesionales.
4. Prepárate para una posible crisis de reputación
Insistimos que una cosa es manejar una red social de forma eso, social, y otra muy diferente de forma profesional. Hay infinidad de casos de marcas que se han visto afectadas ostensiblemente en su imagen por ellos de manejos en sus contenidos.
Un modo profesional de insertarte en las redes sociales es el preparar entes que otra cosa un plan o planes de contingencia. Considera todas y cada una de las posibilidades de respuestas negativas de tu público. Las redes sociales son benévolas, pero también son una exposición a la crítica y a los reclamos de los consumidores. Pero no por temer a estas situaciones, vamos a recular y no cubrir este medio global de ventas tan necesario hoy día.
Toma precauciones ante una posible crisis de reputación. Debes tener un plan de contingencia para saber manejarlas. Un cliente descontento puede hacer mucho daño en internet si no sabes tratarlo en un momento de crisis. Insisto, las redes sociales deben ser manejadas por un profesional. No puedes exponer tu marca. Déjala en manos de alguien que con experiencia. Alguien que sea capaz de establecer un protocolo de actuación y que tome decisiones asertivas frente a cualquier situación negativa que pueda enfrentar tu marca.