Cuando estás emprendiendo debes jugar con muchas pelotas a la vez para que tu proyecto vea la luz. Siempre he pensado que para lograr un objetivo es mejor desmenuzar las actividades en partes para no agobiarnos.
Como me decía algún jefe: “comer un elefante entero en una sentada es imposible, pero si lo partes y lo vas comiendo por pasos seguro lo terminas rápido”. Es por eso que hoy quiero contarte los pasos fundamentales para poderte comer ese elefante, que en este caso será el lanzamiento de tu proyecto.
Autoconocimiento.
Para mí, esta es la base del emprendimiento. Debes saber qué te gusta y qué no te gusta porque créeme que, si te dedicas a algo que no te llama la atención, en menos del año vas a estar harto y queriendo tirar la toalla.
Conocimiento.
La causa principal por la que fracasan los nuevos emprendimientos es que desconocen la dinámica de la industria y a su competencia. Terminan enfrentándose con Sansón a las patadas, pero con los ojos cerrados. Debes saber el terreno en que planeas pelear.
Problema.
Si tu idea no soluciona ninguna necesidad o problema del consumidor ya sea a nivel funcional, emocional o social, difícilmente tendrá buena tracción en el mercado.
Empatizar.
Conocer a tu segmento de cliente en el emprendimiento es fundamental porque sólo así podrás entender qué es lo que realmente está buscando y por qué lo hace. Si no lo conoces, puedes estar dando mensajes equivocados que te lleven a generar poca atención. Te sugiero utilizar la metodología“Design Thinking” para darte a la tarea de conocer profundamente a tu cliente antes de tratar de sacar ideas porque tú creas que sean buenas. Conoce a profundidad a tu cliente y verás cómo él mismo te guiará a que le des las mejores soluciones.
Ventaja competitiva.
Si no puedes diferenciarte de tu competencia, como decía Jack Welch,mejor no lances tu solución. Tener al menos una razón por lo que tu consumidor te preferiría entre el resto, es crucial para tener cabida en el mercado. Ojo, para llegar a una ventaja competitiva no es necesario inventarte el hilo negro, con un simple procedimiento, experiencia de compra, marketing, lo puedes lograr, pero definitivamente debes encontrar al menos una que te haga diferenciarte de la competencia. Para este paso me encanta dar el ejemplo de Starbucks, porque ellos al personalizar su bebida y hacer sentir al consumidor en la sala de su casa lograron un gran éxito y diferenciarse del resto de las cafeterías.
Experimentación.
Un consejo como emprendedora es tener una visión de hacia dónde quieres que vaya tu negocio, pero comenzar con lo que tienes actualmente y en pequeñito. Es decir, lanzarte lo más pronto posible a investigar si tu solución tiene cabida en el mercado, y si no la tiene entender dónde está la falla. Casi ningún emprendimiento le pega a la primera con su primera idea. Todos se van cambiando poco a poco y ajustando según lo demanden sus consumidores. Para esto debes echar mano del “método Lean” de Eric Ries que se basa en Prueba, Experimentación y Medición.
Fit to market.
Hasta que hayas probado que existe un problema real en el segmento de consumidores que quieres atacar y que tu solución es algo que les resuelve perfectamente esa necesidad o problema, habrás alcanzado el “Fit to market”, y es hasta este momento en el que debemos echarle toda la carne al asador para tratar de ganar mercado. Si invertimos grandes cantidades de dinero antes de llegar a este paso estoy segura no estarás optimizando recursos.
Y ahora que ya conoces los pasos infalibles para un emprendimiento exitoso, ¿qué esperas para hacerlo? Con mucho gusto yo te ayudo.
