Históricamente la pequeña empresa se ha identificado con una empresa tradicional. Especialmente en el sector del comercio, si pensábamos en una pequeña tienda nos venía a la mente el comercio de siempre, el mostrador, el tendero amable o aquél que apenas dirigía la palabra a sus clientes. Las grandes empresas eran las que concentraban la innovación, las últimas tendencias en producto y servicio. Hoy en día, sin embargo, con la digitalización, todo esto ha cambiado. Actualmente una pequeña empresa puede ser puntera en tecnología y una pequeña tienda puede ser competitiva en comercio online o eCommerce.
Un nuevo concepto de pequeña empresa
Es tanto lo que ha cambiado el perfil de las nuevas pequeñas empresas que nos hemos visto obligados a usar una etiqueta distinta: las llamamos start-ups. Pero las start-ups no sólo son pequeñas empresas que empiezan su andadura en el sector de la tecnología. Las start-ups pueden arrancar en cualquier sector aunque suelen distinguirse por usar la tecnología y los medios digitales. En el presente, no obstante, esto no es una excepción. El usuario se mueve habitualmente en el medio digital y, por tanto, toda empresa que quiera llegar al grueso de sus clientes de forma adecuada, ha de adaptarse a los canales digitales. Esto, en comercio, significa, entre otras cosas, dominar el eCommerce.
Pensar en eCommerce en términos de negocio
Pero, ¿puede un pequeño comercio ser competitivo en los canales de eCommerce? Por supuesto. El territorio eCommerce está soportado por tecnología pero ésta está al alcance de cualquier economía. Como en todo negocio, se requiere inversión. Y, sobre todo, tener las cosas claras sobre lo que se quiere. En definitiva, una pequeña empresa debe pensar principalmente en términos de negocio, establecer sus objetivos y su estrategia. Todo lo demás llegará cuando se busque la forma de implementar el plan. Así, si la empresa ha definido adecuadamente su público objetivo, cuáles son sus preferencias, usos y costumbres, el empresario habrá podido definir convenientemente el producto y el servicio que ha de rodear al servicio. Igualmente, habrá determinado los canales por los que llegar al cliente objetivo y la estrategia y medios de comunicación con el mismo.
Entre los canales elegidos es muy probable que aparezcan tanto canales físicos como canales online. Si la pequeña empresa decide que debe facilitar la venta online a sus clientes –cuestión que es altamente probable- empieza el camino para diseñar y configurar su sistema de eCommerce. La primera decisión debe girar en torno al modelo de eCommerce que se debe elegir. Inicialmente se encontrará ante una primera decisión: establecer su propia tienda en internet o acudir a plataformas existentes. Es una decisión muy importante que debe ser estudiada cuidadosamente, ya que de ella se desprenderá toda el plan de eCommerce que determinará los resultados de venta.
eCommerce con tienda propia
Establecer la propia tienda de eCommerce es la primera idea que puede venir a un empresario cuando decide iniciar la venta online. Sin embargo, no es una opción que deba elegirse a la ligera. Abrir una tienda online requiere una inversión inicial en una plataforma de eCommerce que habrá que configurar y adaptar a las propias necesidades. Aunque existen paquetes potentes enfocados a grandes empresas, como Magento, también hay otras aplicaciones más sencillas como Prestashop cuya menor complejidad ha facilitado un rápido crecimiento e implantación para pequeñas empresas. Algunos elementos son básicos en la tienda: catálogo de producto, cesta de la compra y pasarela de pago.
Configurar una buena tienda de eCommerce es sólo el comienzo. Después hay que darla a conocer, ganarse la confianza de los clientes para que se decidan a hacer clic en el botón de comprar (y, sobre todo, en el de pagar) y poner en marcha servicios esenciales como los de la entrega y la devolución. Por eso conviene valorar también la opción de plataformas multi-tienda muy conocidas como eBay y Amazon: los llamados Marketplace. Un marketplace es a un centro comercial lo que una tienda propia es a un comercio a pie de calle. Proporcionan el tráfico de clientes y muchas otras cosas.
Nuestro eCommerce en el marketplace
Los marketplaces abanderan marcas conocidas por los clientes y ya se han ganado su confianza. Además de proporcionar tráfico de ámbito internacional, los marketplaces se ocupan de la logística y el pago; dos aspectos muy delicados en eCommerce y con los que nos jugamos la confianza del cliente. También viene dada una plataforma tecnológica potente y una app para el móvil que muchos usuarios ya tienen instalada. Las fotos y descripciones de producto deben cuidarse igualmente. Este tipo de plataformas tiene el inconveniente de que se pierde el control del flujo de clientes y el conocimiento de marca. Sin embargo, puede ser una buena forma de empezar a vender online y aprender algunos aspectos importantes de la venta en el medio online. También puede ser un canal complementario a la propia tienda online.
eCommerce en cifras y consejos
Según un estudio de eBay, el 20% de las pequeñas y medianas empresas ya vende por internet. Los que aún no lo hacen es por falta de preparación técnica, problemas logísticos y falta de recursos para la atención al cliente. De los negocios que ya operan en eCommerce, más del 80% lo hace con una tienda propia en la web, el 18% vende en redes sociales, más del 12% tiene tienda en una plataforma de eCommerce y un 3% vende en portales de descuento. Los números y el análisis del mercado animan a las pequeñas empresas a vender online; un medio en el que puede lograr ser competitivas. Si bien conviene previamente seguir algunos consejos de comercio electrónico para pequeñas empresas.
