Revista de Marketing y Negocios

El alza de precios en los videojuegos: ¿Crisis Inevitable?

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La industria de los videojuegos ha experimentado un crecimiento exponencial en las últimas décadas, tanto en términos de tecnología como de alcance de mercado. Sin embargo, este crecimiento ha venido acompañado de un aumento significativo en los costos de desarrollo y, consecuentemente, en los precios en los videojuegos para los consumidores. Con el reciente anuncio del Nintendo Switch 2 y los ajustes de precios por parte de otras compañías como Microsoft surge la inevitable pregunta: ¿estamos ante una nueva normalidad en los precios de los videojuegos?

Para contestarla con lujo de detalles, queridos lectores de Soy Marketing, es necesario hacer una recapitulación de cuál era el costo en el siglo pasado de estos bienes, para ganar un poco de perspectiva y para ello me centraré en presentarles 3 ejemplos al respecto.

  • Chrono Trigger (Super Nintendo): Este aclamado RPG de Squaresoft tuvo un precio de lanzamiento considerablemente alto en agosto de 1995 en Norteamérica, generalmente situándose entre los $70 y $80 USD. Algunos minoristas pudieron haberlo vendido incluso un poco más caro, llegando ocasionalmente a los $90 USD. Este precio elevado se debía en parte a la complejidad y tamaño del juego en comparación con otros títulos de la época.
  • Final Fantasy VI (conocido como Final Fantasy III en Norteamérica también de Super Nintendo): Lanzado en nuestro continente en octubre de 1994, Final Fantasy VI también fue un título premium con un precio de salida elevado. Su costo rondaba entre los $80 y $90 USD. Similar a Chrono Trigger, la magnitud y calidad de este JRPG justificaban su precio más alto en el mercado.
  • Y por último Street Fighter II: La situación de este videojuego es un poco más variada debido a las diferentes versiones que salieron y las consolas en las que aparecieron. La versión original de Street Fighter II llegó al Super Nintendo en 1992. Su precio de lanzamiento fue de alrededor de $70 USD y fue uno de los juegos más populares y buscados en la consola. En cambio para Sega Genesis fue “Street Fighter II’: Special Champion Edition”, lanzada en 1993. Si bien encontrar un precio de lanzamiento único y definitivo para Norteamérica es un poco más difuso que en SNES, los precios iniciales se cree que estuvieron en un rango similar a la versión de la consola de Nintendo posiblemente alrededor de los $70 USD o un poco más, considerando que los cartuchos de mayor tamaño solían ser más caros. En el Reino Unido, se lanzó a alrededor de las £59.99.

Con esto en mente podemos decir que no es algo nuevo que este pasatiempo llegue a tener estos precios en el apartado de software, ya antes se habían presentado estos costos aunque definitivamente el costo de vida y la inflación eran otros. Ya con este punto sobre la mesa ahora sí, enfoquémonos en desmenuzar el bombazo que fue el anuncio de la nueva consola híbrida de Nintendo y como esto destapó la Caja de Pandora.

El caso del Nintendo Switch 2 y el aumento de Xbox

Consola Nintendo Switch y controladores sobre un fondo rojo junto a una consola Xbox Series X y un controlador sobre un fondo verde, resaltando las diferencias en las experiencias de juego y los precios en los videojuegos.

Nintendo anunció que el Switch 2 estará disponible a partir del 5 de junio de 2025, con un precio base de $449.99 USD y un paquete que incluye Mario Kart World por $499.99 USD. Este aumento de precio en comparación con el modelo original ha generado diversas reacciones entre los consumidores. Además, algunos títulos de lanzamiento, como Mario Kart World por separado, se venderán por $79.99 USD, marcando un incremento respecto al estándar anterior de $59.99 USD. Esto sin duda abrió camino para que las 3 grandes de la industria empezaran a tomar medidas al respecto y el caso en concreto que le siguió a la Casa de Mario fue el de Xbox.

Microsoft anunció el pasado 1º de mayo que el costo de sus consolas quedaría de la siguiente forma:

  • Xbox Series S 512 GB: $379.99 USD (antes $299.99 USD)
  • Xbox Series S de 1 TB: $429.99 USD (antes $349.99 USD)
  • Xbox Series X Digital: $549.99 USD (antes $449.99 USD)
  • Xbox Series X: $599.99 USD (antes $499.99 USD)
  • Xbox Series X 2TB Galaxy Edición Especial $729.99 USD (antes $599.99 USD)

Que como podemos observar en el caso más alto de la versión X con 2TB alcanza un aumento de $130 USD, lo que es sin duda un golpe muy bajo para las carteras de los videojugadores, o al menos para los que seguimos siendo considerados como economías emergentes.

Y en cuanto al software el aumento llegará para la temporada decembrina, alcanzando hasta los $79.99 USD por título, lo que me suena a una estrategia muy pensada para que los que aún no tengan contratado Game Pass Ultimate, que te permite tener títulos de lanzamiento en día uno, pues lo hagan y esto termine nutriendo su ecosistema, movida muy inteligente de su parte debo agregar.

¿Pero no solo se trata de una cuestión de querer cobrar más porque sí. Hay una razón muy importante al respecto y que son todos los costos de desarrollo que involucra traer a la vida un título AAA.

El impacto de los costos de desarrollo

Ilustración de una alcancía con una moneda, rodeada de una consola de juegos, un controlador, un dispositivo de juego portátil y un cuadro de preguntas, mientras varias manos levantadas se extienden hacia arriba, resaltando la importancia de los precios en los videojuegos.

Elaborar videojuegos AAA se ha vuelto cada vez más costoso. Títulos como Red Dead Redemption 2 y Cyberpunk 2077 han tenido presupuestos que superan los $300 millones de dólares. Se estima que Grand Theft Auto VI, previsto para 2026, podría tener un costo de desarrollo cercano a los $1,000 millones de dólares, incluyendo marketing y otros gastos asociados, lo que de cierta forma justifica el costo final que se trasladaría al consumidor.

La ambición de los proyectos de videojuegos se traduce en ciclos de desarrollo más extensos. Un juego AAA puede llevar fácilmente entre 3 y 5 años (o incluso más) desde la concepción hasta su lanzamiento. Durante este tiempo, los costos operativos, los salarios y la inversión en tecnología continúan acumulándose, lo que inevitablemente influye en el precio final del producto.

Si a esto le agregamos que los jugadores esperan cada vez más de sus videojuegos. La demanda de gráficos de punta, jugabilidad innovadora, experiencias inmersivas y contenido post-lanzamiento (DLCs, actualizaciones, etc.) presiona a los desarrolladores a invertir más recursos, lo que se refleja en el precio de venta.

Opiniones de expertos como Michael Pachter, analista senior de videojuegos en Wedbush Securities, destacan que estos incrementos actuales eran inevitables debido a la inflación sostenida y al incremento exponencial en costos de desarrollo tecnológico y recursos humanos necesarios para esta categoría de entretenimiento. Según Pachter, “es urgente que la industria repiense su modelo financiero para mantener la sostenibilidad y evitar alienar a segmentos importantes del mercado.”

La realidad es que ningún miembro actual de la industria ha encontrado la forma de sostener los costos del año pasado y convendría evaluar cual es el fuerte de las tres compañías principales, lo que nos arrojará sin duda para dónde se moverán.

Comparando a Nintendo, Xbox y PlayStation, observamos distintas estrategias para enfrentar estos incrementos. Nintendo se mantiene firme en su propuesta de valor basada en innovación y exclusividad de contenido. Microsoft se inclina hacia servicios de suscripción con Xbox Game Pass, buscando reducir la barrera económica de entrada. Sony, por su lado adopta un modelo híbrido, combinando juegos premium con ofertas periódicas, descuentos digitales e inclusión de su catalogo exclusivo en plataformas de PC gaming como Steam.

Si a lo anterior le sumamos la inflación generalizada a nivel mundial que impacta en todos los sectores, incluyendo la industria del videojuego, los aranceles que el presidente de Estados Unidos está imponiendo, el aumento de los costos de las materias primas, la logística, la energía y otros servicios se convierte en la tormenta perfecta para que este aumento sea la nueva realidad.

Y por último, pero no menos importante, es necesario hablar de las implicaciones que tendrá para la industria y sus asiduos compradores.

Posibles reacciones de la industria y los consumidores

Una persona sostiene una billetera vacía rodeada de controladores de videojuegos, consolas y monedas con símbolos monetarios sobre un fondo naranja, lo que refleja el impacto de los precios en los videojuegos.
  1. Adopción de modelos de suscripción: Servicios como Xbox Game Pass y PlayStation Plus podrían volverse más populares, ofreciendo a los jugadores acceso a una amplia biblioteca de juegos por una tarifa mensual. Lo que impulsará aún más la desaparición de formatos físicos de distribución para abrazar cada vez más los formatos de adquisición digital
  2. Aumento en la producción de juegos independientes: Con presupuestos más modestos y precios más accesibles, los juegos indie podrían ganar mayor protagonismo en el mercado, lo que en lo personal creo que es una oportunidad única para todos estos equipos creativos alrededor del mundo para traer a la mesa nuevas ideas y desarrollos.
  3. Segmentación del mercado: Podría surgir una división más clara entre juegos premium de alto costo y títulos más asequibles, adaptándose a diferentes segmentos de consumidores. Este punto puede tener su pro y sus contras relegando títulos y gamers por segmentos y/o posibilidades de consumo, que le daría un empuje más amplio a juegos free top lay como los desarrollados por Hoyoverse.
  4. Innovación en la Distribución y el Acceso: Las tecnologías de streaming de juegos (como Xbox Cloud Gaming o PlayStation Plus Premium) podrían ofrecer nuevas formas de acceder a los juegos sin la necesidad de comprar copias digitales o físicas a precio completo.
  5. Aumento del Mercado de Segunda Mano y la Piratería: Si los precios de los juegos nuevos se vuelven prohibitivos para algunos consumidores, podríamos ver un resurgimiento del mercado de segunda mano o, lamentablemente, un aumento de la piratería como alternativas más económicas, que como ya sabemos es un juego del gato y el ratón que muy a pesar de la industria, seguirá ocurriendo.

Para los profesionales del marketing y la publicidad en el sector gaming, este nuevo panorama presenta tanto desafíos como oportunidades. Será crucial comprender las nuevas sensibilidades de los consumidores, comunicar eficazmente el valor de los productos y explorar estrategias de precios innovadoras que permitan mantener la rentabilidad sin alienar a la base de jugadores.

El anuncio de Nintendo y la estrategia de Xbox han abierto un debate necesario sobre el futuro económico del gaming. La respuesta de los consumidores y la forma en que la industria se adapte a estas nuevas realidades definirán el panorama del entretenimiento interactivo en los años venideros. En este juego de equilibrio entre costos, calidad y expectativas, la última palabra, como siempre, la tendrán los jugadores.

Si tu eres uno de ellos ¿qué opinas al respecto?

¡Te leo aquí debajo y nos leemos en junio de nueva cuenta!

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Eduardo Zamora Reynaud

Director General de Kung Fu Klan

He tenido la oportunidad de participar durante 20 años en la concepción creativa y estratégica de campañas de marketing integrales para empresas de consumo masivo.. Mi trayectoria profesional ha incluido roles como Director de Arte, Gerente de Publicidad, Director General Creativo, Vicepresidente Creativo y actualmente Director de Kung Fu Klan.

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