Me queda claro que hay mucho estrés e incertidumbre en el ambiente. La nueva normalidad ya es una realidad y cada día la vivimos de manera más contundente. Por ello, entender de qué va esta nueva situación me parece muy relevante para identificar oportunidades y hacer cambios en nuestros negocios.  Esta vez me basé en un análisis realizado por Carlos Glatt y más de 50 expertos en innovación que me pareció muy acertado.

El vivir hiperconectado y de forma remota definitivamente llegó para quedarse, trayendo consigo pocas barreras entre los horarios laborales y los tiempos personales. Aquellos enormes corporativos serán recordados como los dinosaurios de 1980-2020 y difícilmente volverán a ser iguales. El gasto en renta de oficinas decrecerá de forma importante. Levantarnos todos los días para ir a una oficina, todos al mismo tiempo, posiblemente se torne en una actividad del pasado. Los espacios para reunirnos serán para socializar y crear networking con nuestros compañeros de trabajo más que trabajar en el día a día. Nos debemos acostumbrar a trabajar con asistentes virtuales, con aplicaciones disruptivas y realidad virtual que nos permitan tener una junta con personas ubicadas en China, Argentina, Dubai y México dentro de una sala donde nos podamos ver virtualmente por medio de unos lentes.

Esto nos lleva al segundo gran cambio: Se prevé que más del 50% de los hoteles de trabajo desaparecerán. Muchos de los viajes de trabajo para tener reuniones de trabajo se cancelarán y cambiarán a formato virtual generando ahorros para las empresas.

La Inteligencia Artificial (IA) se hace presente cada vez más en sistemas de conexión virtuales y disruptivos con el fin de crear más experiencias personales y cercanas. Aunque cada quien en su casa, sentirnos unidos se vuelve muy importante.

Las personas gastan para adaptar sus hogares con mejores soluciones tecnológicas. Muchos verán la oportunidad de movilizarse y dejar de vivir en una gran ciudad. Las personas buscarán una mejor calidad de vida mientras las empresas se enfocarán en subir su productividad por medio de sistemas digitales que midan los KPI, resultados y tiempos eficientes de trabajo más que seguir evaluando el ya clásico “hora pompi”. Esto también abre una acérrima competencia global por el mismo trabajo. Contratar a los mejores a nivel mundial cada vez será más sencillo, económico y eficiente para las empresas. Las diferencias entre contratar una persona local que una extranjera cada vez se diluye más empezando a dar paso a una verdadera comunidad global.

Muchos empleos que realizan actualmente operaciones repetitivas se eliminarán con nuevas tecnologías. Habrá muchos despidos de forma global y quien no se prepare a esta nueva era será complicado que se pueda volver a unir a la fuerza laboral.

La educación no volverá a ser lo que fue antes de la pandemia, será presencial pero tecnológicamente adaptativa. Los alumnos tendrán la oportunidad de aprender de forma personalizada. Los modelos “blended” o mixtos entre offline y online serán lo más normal. Ser autodidacta cada vez es más apreciado por las empresas, el título universitario pierde valor ante las méritos y hechos.

El sistema médico cambia, cada vez más será normal tener una cita médica por teleconferencia. Inclusive se puede divisar un futuro dónde los dispositivos digitales serán las herramientas para evaluar nuestra salud contra una enorme base de datos creada por millones de médicos a nivel mundial para poder hacerte una revisión médica rápida.

Nuevos modelos de información y noticias por suscripción curada por expertos para evitar los “fake news” serán cada vez más apreciados.

E- commerce sigue al alza en plataformas sociales y competirán con los grandes retailers en línea como Amazon, Mercado libre y Alibaba; muchas tiendas físicas batallarán para mantenerse abiertas y deberán buscar verdaderas experiencias que den un plus al cliente para dirigirse a comprar físicamente. 

Finalmente, lo natural y saludable sigue tomando fuerza, todo sobre fitness continuará siendo prioridad. Ser sano se convierte en el “nuevo lujo”, producir nuestros propios alimentos, con mejor calidad, cobra relevancia. 

Estamos ante un nuevo mundo donde la humanidad renace y cambia sus valores y prioridades. Se replantean su misión en la vida y aprecian mucho más la salud y su balance de vida. Sin duda alguna se abrirán muchas oportunidades de negocio sólo es cuestión de tener los ojos bien abiertos para identificarlas. Bienvenido Futuro, estamos listos para ti….