1. Home
  2. »
  3. Columnistas
  4. »
  5. La reputación se construye todos los días

La reputación se construye todos los días

“Crea fama y échate a dormir” es un conocido refrán que hace alusión a la reputación que vamos construyendo o no, a lo largo del tiempo.  Warren Buffet dijo alguna vez que. “Se necesitan 20 años para construir una reputación y 5 minutos para arruinarla…”  y por supuesto que es así: el prestigio (reputación positiva) se adquiere con acciones consistentes día tras día. Es igual para una corporación como lo es para una cualquier persona. No confundamos esto con la marca personal o empresarial, no estoy hablando de likes o de imagen, me refiero a esa huella que vamos dejando por la vida.

Ahora bien, ¿Lo que piensan los demás es parte de nuestra reputación? Si, de alguna manera lo es porque de ahí se desprende comunicación hacía otros que podría ser “ruido” que distorsiona nuestra reputación e imagen o podría estar conformada por mensajes positivos que los mejoran. De la forma que sea no tenemos control sobre eso. Como dicen por ahí es “Nadie es monedita de oro” ,  pero lo que sí es importante es que seamos congruentes con nuestros valores y nuestras acciones en los diferentes contextos en los que nos movamos y ¡Qué mejor! Que esos valores estén alineados a valores universales que nos permitan contribuir a un ambiente cordial y a que el mundo sea mejor. Lo que sí me parece crucial es estar en un contexto propicio que nos permita crecer, ser y estar alineados con nuestros valores,  por eso te dejo 10 reflexiones acerca de lo que considero no debemos olvidar para construir nuestro prestigio a nivel general:

  • “Sincroniza el audio con el video”, es una frase de mi generación que se refiere a la congruencia. Haz lo que dices, no sólo lo digas, ese es un buen primer paso para generar una buena reputación.
  • Conforma un círculo de amistades y conocidos que compartan tus gustos, valores y forma de ser,  lo más posible. Por ejemplo: normalmente la gente que gusta del deporte coincide recurrentemente en ciertos lugares, así también los fumadores, emprendedores, intelectuales, etc. Ese contacto continuo contribuye a tu imagen y reputación así que piensa bien con quien andas… dice mucho de quién eres…
  • No bases tu vida en el “qué dirán”, no es mentalmente saludable depender de lo que piensan o dicen los demás.  Se firme con tus convicciones pero también actúa y comunícate claramente  para evitar “cosas buenas que parezcan malas”.
  • Los malos entendidos deben ser aclarados en la medida de lo posible siempre. No dejes que se “hagan bolas de nieve innecesarias” si te percatas de alguna comunicación adversa en alguno de tus ámbitos.
  • Recuerda que no todo mundo es conocedor y/o practicante de “los cuatro acuerdos” (1)  así que reconoce que sí existen personas mal intencionadas que disfrutan del chisme o de vivir a través de la vida de otros. Lo único que puedo decir es identifícalos y aléjate lo más posible.
  • Tu reputación puede ser mejorada en el momento que lo decidas, lo único que necesitas es lograr que el balance positivo supere al negativo. Y ¡Si! Requiere de tiempo, no se logrará de la noche a la mañana pero es posible. 
  • Una buena reputación suele generar simpatizantes que serán aliados en los mensajes acerca de ti cuando compartes el contexto con personas con tus mismos valores, por eso es importante saber elegir tu lugar…
  • “El que se enoja pierde”. Sí, todo mundo tenemos nuestros  “cinco minutos” y no me refiero a un momento de fama sino a un mal momento o impulso negativo. A veces es inevitable, lo importante es notarlo y no desperdiciar energía donde no vale la pena. La inteligencia emocional lo es todo.
  • Una buena manera de tener un comportamiento “apropiado” con el mundo es tener un balance individual, esto va desde horas de sueño, buena nutrición, esparcimiento, trabajo gratificante etc.  Si notas cambios en tu humor o reaccionas fuera de lo habitual revisa como puedes recuperar ese balance personal.
  • Ve hacia adelante y construye todos los días. Recuerda que para para tener cosas nuevas debes tener espacio para ellas, así que no tengas miedo de  cerrar ciclos y caminar tu camino cuando es necesario. Eso sí, recuerda que agradecer las etapas y contribuciones a quien lo merece porque el “mundo da muchas vueltas”.
la reputación

Estamos a punto de cerrar el año y no está de más un ratito de reflexión personal. Yo misma he pasado por algún momento que requiere “redireccionar” para  construir el camino que quiero, así que  espero que mi experiencia sea un granito de arena para que   tus metas personales se logren,   a la par de tu buena reputación cada día. ¡Hasta Luego!

Neuromarketing: Descifrando el Cerebro del Consumidor | Duncan C. & Daniel R. & Hans Hatch

TAGS:

COMPARTIR ARTÍCULO

Facebook
Twitter
Telegram
WhatsApp

DEJAR UN COMENTARIO

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

ARTÍCULOS RELACIONADOS

Cerrar ciclos

Tips para abrir y cerrar ciclos

Todo inició tendrá algún final. Lo importante es saberlo, entenderlo y si es posible programarlo debidamente para iniciar un nuevo ciclo lo mejor posible.