Durante varios años me he hecho la pregunta constante sobre ¿qué es el marketing social? Y para ser honesta, aún no terminan de convencerme las diferentes definiciones que he aprendido sobre el término, ya que con base a mi experiencia, el marketing social más que una definición es una experiencia personal que lo traslado a un estilo de vida.
¿Qué es el Marketing Social?
Sin embargo, para entrar en contexto es importante compartir lo que el padre del marketing moderno define como marketing social: “el diseño, implementación y control de programas que buscan incrementar la aceptación de una idea o causa social en determinados grupos objetivos”.
Hace unos meses, tuve una reunión con el Rector de una universidad muy prestigiada en el norte de nuestro país. Antes de contarte la anécdota, debo mencionar que fue una sesión de trabajo muy interesante y productiva. Los primeros diez minutos, como seguramente te imaginas, fue un momento de presentación, agradecimiento, y mucha escucha.
Nos comentaba el Rector que la universidad que él dirige ha ganado cientos de premios a nivel nacional: concurso de robótica, concursos de banda de guerra, premios de investigación, 1er lugar en neurociencia, 1er lugar en competencias de ingeniería, tetracampeones en torneos deportivos, y mientras el Ing. nos comentaba todos estos logros, en mi cabeza no dejaba de pasar una sola pregunta: ¿y su casa de estudios cómo trasciende en la vida de los alumnos?
¡Alto!, no digo que los logros académicos no sean importantes, al contrario, son sumamente relevantes y gratificantes pues en gran parte es la promesa de valor que ofrecen las Universidades. Sin embargo, hay que ser realistas, en esta vida lo único que te llevas es el amor y la trascendencia que dejas en la vida de las personas.
Si bien nos va, en muchos años, pueden ponerle nuestro nombre a una calle, a un monumento o hasta algún espacio designado en el lugar donde trabajamos. Pero ni miles de calles, de monumentos o de placas podrán trascender en la vida de las personas como lo podemos trasmitir de manera directa cuando tratamos con seres humanos.
Actualmente, tengo el honor de colaborar de manera directa con la Fundación más grande del país y probablemente una de las más grandes del mundo. Gracias a la generosidad de millones de mexicanos, hemos atendido a más de 400,000 personas, más de 42,000 niños y niñas en un proceso de rehabilitación neuromusculoesquelética anualmente, más de 400 niños con cáncer anualmente atendiéndose de esta terrible enfermedad, más de 2,000 niños con autismo mejorando su calidad de vida y si les pudiera transmitir como siento el corazón y el estómago cada vez que escucho que un niño con cáncer respondió de manera positiva a su tratamiento o que un niño con discapacidad egresa de nuestro centro con las herramientas necesarias para desarrollarse y enfrentar al mundo; es como cuando el niño va a Disney por primera vez: se despierta lleno de emoción y se duerme agotado pero con una gran satisfacción.
Marketing social para posicionar a la marca
Por tal motivo, en este espacio estaremos hablando ¿cómo es que el marketing puede influir en el posicionamiento de una marca? y no precisamente para influir en la conducta de la compra de un producto o servicio, si no en la influencia que tiene para el cambio de comportamiento del consumidor/usuario o para generar este intercambio de valor que tanto necesita nuestra sociedad.
Es por ello, que repito lo que mencioné en un inicio, el marketing social puede tener cientos de definiciones, sin embargo, para poderlo comprender de la mejor manera, siempre tendrás que vivirlo y experimentarlo, para posterior a ello poderlo aplicar de la mejor manera de la forma más habitual y cotidiana posible: ¡TU ESTILO DE VIDA!
Para finalizar, te dejo con una frase que en alguna ocasión le escuché a mi querido Chobi Landeros, Presidente de Fundación Teletón: “siempre contentos, nunca satisfechos”. Y así es como debemos de vivir, todos los días vivirlos al máximo y llenos de alegría por lo que hacemos, pero siempre con el pensamiento que podemos hacer aún más por los demás.