Pienso que todas las personas que escribimos algo para otros,  mostramos de alguna manera el momento que estamos viviendo,  nuestros pensamientos; el aprendizaje que hemos tenido por alguna causa, lo que observamos en nuestro día a día e incluso hasta nos desahogamos  de alguna situación personal  que según nosotros da algo para la reflexión de alguien más, que se encuentre en sintonía. En muchos casos acertamos y aunque no siempre es totalmente explícito y puede existir un nivel de prudencia de nuestra parte, el hecho es que cada letra que lees denota algo del creador del texto y eso es interesante y maravilloso. Así que en esta ocasión he querido ser un poco más abierta que otras veces al compartir mi experiencia acerca de un evento que me tenía muy emocionada al iniciar el 2020: La conferencia de Simon Sinek en Enero de este año, parte de su Mindset Tour. 

Les cuento que viajé exclusivamente a California (previo al surgimiento del COVID-19), para acudir a la plática de este autor y conferencista que he seguido desde hace tiempo como resultado de un video específico que recibí por parte de una amiga. ¡Sí!, todo empezó cuando en 2015 comenté las diferencias que veía en las personas que formaban parte de mi equipo de marketing y lo  complicado que estaba siendo para mí crear un grupo sólido e inspirado con “millenials”,  fue entonces que recibí una entrevista que seguramente has visto, donde Simon Sinek daba su punto de vista acerca de esta generación, que ya muy bien dicho tiene características muy específicas por el contexto en que nació y que vive. En ese tiempo también tuve un entrenamiento de alguien más del que aprendí mucho y que se merece un artículo completo, sin embargo desde esas épocas la información me ayudó a comprender más a este grupo de personas que hoy, son la generación productiva más importante. 

Las conclusiones han sido procesadas de diferentes maneras y eventualmente la comunicación al respecto ha evolucionado recordándonos que lo único constante es el cambio, y así seguirá siendo siempre. Entonces hoy, es un día de esos en el que después de casi 4 meses decidí retomar la experiencia vivida y comentarla tras la reflexión resultado del momento en que nos encontramos y la evaluación de la mejor manera de expresarlo. 

Ciertamente mi visita a Los Angeles fue de último momento. Yo quería ir a San Francisco pero tardé en decidir y sólo encontré espacio en L.A. Estaba pasando por una situación complicada y pensé que sería un buen cierre de etapa atreverme a conocer a este personaje del cual he visto gran cantidad de videos con los que estoy, en la mayoría de los casos, muy de acuerdo. Pagué casi el doble del costo por el boleto por la indecisión, más mi traslado y hospedaje para poder estar en la conferencia en Los Angeles el 31 de enero del 2020 y ahí estuve, más que puntual, emocionada y expectante. A eso fui y esperaba una experiencia “marketera”; con esto me refiero a que esperaba mucha producción, dado que si algo tienen “nuestros vecinos del norte” es esta capacidad de hacer las cosas muy en grande, y hay que reconocer que saben cómo hacerlo. La sede fue un teatro cerca del Fashion district de la ciudad, yo me hospedé en un vecindario contiguo por tema de presupuesto pero relativamente cerca del recinto.  Llegué temprano aunque la conferencia inició cerca de 30-40 minutos tarde, había en la entrada libros a la venta, y pre-autografiados por Simon, también había un stand de playeras con la leyenda “Inspire someone”, con las letras de cabeza y ciertamente con bastante discreción. 

Después de observar todo esto y encontrar mi asiento, llegó el momento y escuché atentamente la conferencia que no fue muy larga. Algo que llamó mucho mi atención fue que en varios momentos hubo referencia e insistencia de que las ideas comentadas eran un “movimiento” para inspirar a otros, sin embargo muchos de esos conceptos me parecían naturales y pensaba que todos debían ya entenderlos. Había personas intensas al realizar sus preguntas, otras en las que me incluyo neutrales y atentas, y otras personas que entraban con palomitas y refresco al teatro. ¿Era una conferencia seria o sólo otra forma de entretenimiento californiano? De alguna manera eso hizo que no me dedicara 100% al artículo después de llegar a México. Mi expectativa era diferente, los videos de Youtube tenían un enfoque corporativo que me gustaba más, no encontré la cercanía por parte del conferencista que configuré en mi mente así que traté de aprovechar mi visita conociendo un poquito la ciudad y comiendo en un lugar rico antes de volver a casa. Y ¿Qué hace que hoy decidiera escribir acerca de este evento? El reconocimiento de que, aunque algo no sea 100% de lo que tu esperas o tu piensas, no significa que sea incorrecto, es el mismo entendimiento que hoy me ayuda a relacionarme mejor con personas de otras generaciones o pensamientos, para formar equipos o crear relaciones interpersonales más nutritivas.  Hay que considerar que hay diferencias culturales y educativas por país, por ciudad, por región, por familia…

Todos somos humanos pero nuestros pensamientos y visión son el resultado de nuestra vida y contexto más cercano. El conocer otras ideas, tradiciones, pensamientos, idiomas ó simplemente a personas que hacen las cosas de otra manera es una gran oportunidad y debemos valorarla de verdad. Hoy estoy segura que se requiere ser un poco rebelde para inspirar a otros, hacer las cosas diferentes pero hacerlas, con convicción y con un objetivo claro ya que eso puede convertirse en un “movimiento inspirador” como lo llama Simon Sinek,. Ojalá que poco a poco se convierta en un actuar cotidiano porque eso significa que ha trascendido en los demás y, que somos más conscientes de que cualquier objetivo, logro, meta no son nada sin estar vivos ó sin las personas a nuestro alrededor; cualquier cosa que valga la pena no debemos/podemos hacerla solos. ¡Nos vemos pronto! Aunque sea en un contexto diferente. =)