Seguramente ya has hecho la búsqueda de la definición y has encontrado “n” número de respuestas que coinciden entre sí:
“Ramificación del marketing que tiene como objetivo desarrollar, promocionar, difundir y posicionar entidades, marcas, atletas, productos y servicios a través del deporte”.
¡Y si, es todo eso y más!
Los orígenes del marketing deportivo datan del año 1920 en EEUU, época en la que algunas empresas se asociaron con las grandes ligas para incrementar sus ventas; un ejemplo de esto es Wheaties (cereal de la familia General Mills, que tuvo su primera asociación con una liga menor de baseball en Minneapolis en 1927; su slogan: “Wheaties-The Breakfast of Champions”).
Con los años las marcas incrementaron su difusión teniendo menciones durante la narración de los encuentros de baseball, y posteriormente la aparición de su publicidad en televisión. En los 70’s los atletas iniciaban con la promoción de marcas deportivas, entre las que destacan Nike y Adidas. Después en los 80’s inicia la estrategia de los patrocinios de figuras del deporte, estrategia eficaz que se mantiene en el mercado a nivel global. Posteriormente llega el internet herramienta que permitió gestionar la venta de localidades de los Juegos Olímpicos – Atlanta 1996, facilitar información a medios de comunicación, la consulta de los aficionados, y la exposición de los auspiciantes del evento. Otro pionero en el uso de la web, fue la NFL seguido por el Tour de Francia.
Después entre el 2004 y 2006, llegan las redes sociales: Facebook y Twitter. Se modificó radicalmente la comunicación e interacción entre las grandes marcas o entidades deportivas con sus clientes – aficionados.
El SUPER BOWL, es un ejemplo claro de todo lo mencionado anteriormente. Es una final de fútbol americano que atrapa la atención de chicos y grandes, es una fiesta en la que se agotan las localidades, se paralizan ciudades, se reúnen familias, se desbordan bares y restaurantes en los EEUU para ver la transmisión. Evento que funge como vitrina para exposición de las marcas patrocinadoras. Es la espera del tan ya afamado Halftime Show. Momento que NFL aprovecha para la venta de camisetas y promocionales. Las televisoras ganan ratings, y el evento se vuelve trending topic en redes sociales.
La afición comparte, retuitea, comenta el previo, el durante y después del juego sin dejar de lado el marcador final. Al día siguiente, en las primeras planas de los periódicos la imagen del equipo ganador festejando con el super tazón (trofeo). Y seas o no aficionado a este deporte, estas inmerso en toda la publicidad y comunicación que circula en medios.
La filosofía del marketing deportivo ha evolucionado.
¿Qué buscan en la actualidad las marcas y entidades deportivas?
Lograr brand awarness, engagement. Brindar un buen servicio y atención al cliente. Y por supuesto vender, pero hay un concepto que se ha convertido prioritario en el deporte; que es generar experiencias irrepetibles e inolvidables para la afición. Después de esto habrá mayor interactividad y conexión con el producto o servicio que se este promoviendo.