En noviembre de 2020 Twitter lanzaba sus Fleets y tan sólo ocho meses después, los manda a volar.
@IlyaBrown, VP Product de Twitter, declaró que la introducción de este formato de posteo, estaba enfocada en atraer más personas a la conversación en Twitter, pero que lamentablemente no fue así. (Acá te lees todo su comunicado: https://blog.twitter.com/en_us/topics/product/2021/goodbye-fleets)
Me encanta escribir en soy.marketing porque es un espacio en el que puedo liberar todos mis análisis, especulaciones y teorías conspirativas, de otra forma, tendría que contarselas a un psicólogo que me cobraría por ello. Pues bueno, hace 8 meses saqué una columna donde hacía un análisis sobre el posible éxito o fracaso de los Fleets y LinkedIn Stories. Te invito a leerla en: https://soy.marketing/a-mi-no-me-vengas-con-tus-stories/
En esa columna resaltaba que el público sería el principal responsable en determinar el resultado final de dichas “innovaciones”, pues de no encontrarlas atractivas o útiles, simplemente no les darían uso y por lo tanto las condenarían a su desaparición. A menos de un año de haber escrito aquella columna le puedo dar seguimiento para confirmarles que al menos el público de Twitter no validó la versión de historias efímeras de esta red social y por lo tanto ya no estarán disponibles.
También en aquella columna me atrevía a decir que le veía más posibilidades de éxito a los Fleets que a las Instagram Stories, y hoy en día, creo que he visto a más twitteros usando este recurso que al público de LinkedIn. Incluso un buen amigo y experto en social listening, en su perfil de LinkedIn, ante la reciente noticia de la desaparición de los Fleets, aventó la pregunta: “¿Será que más plataformas se salgan en fila?”. Yo le conteste que sí.
¿Por qué no habrán funcionado los Fleets?
De entrada, creo que el valor de lo efímero, tal vez esté sobrevalorado o simplemente mal entendido. Este tipo de publicación que desaparece a las 24 horas, creado por Snapchat, copiado por Instagram y después por todas las demás, es un recurso que funciona bien en ciertas plataformas y ante ciertos públicos. Siendo específico, creo que fuera de Instagram y Facebook, están de sobra. Es por eso que cuando se lanzaron los Fleets, hubieron memes que aseguraban que próximamente habría historias en Excel, burlándose obviamente del posible exceso por parte de las plataformas, de andar copiando este recurso que ya vemos en LinkedIn, Facebook, Instagram, WhatsApp y hasta en YouTube.
Por lo tanto, primero hay que entender el verdadero valor de lo efímero. Recordemos que las redes sociales no son medios de comunicación, simplemente son medios de interacción social. Cada una de estas plataformas tiene su propio formato para generar, facilitar e impulsar la interacción de los usuarios. Viéndolas de este modo, nos podemos dar cuenta que si bien hay redes para compartir con los amigos y la familia, como es el caso de Facebook e Instagram, también hay otro tipo de redes donde las interrelaciones son más frías, como lo que pasa en LinkedIn, donde los contactos principalmente son colegas y compañeros de trabajo. Pero también hay otro tipo de redes donde los contactos pueden ser básicamente desconocidos, como es el caso de Twitter.
Para mi, las historias efímeras son un tipo de interacción para contactos cercanos y de confianza, por lo tanto, se ven mejor en Facebook e Instagram. Desde mi punto de vista, al compartir un post en una de estas plataformas es porque queremos que perdure, mientras que al postear una historia lo veo más como un esfuerzo por compartir algo espontáneo que tal vez no vale la pena conservar.
Por ejemplo, cuando alguien sale de vacaciones, muy seguramente al final de cada día va a subir como post, una serie de fotos bien seleccionadas y editadas que vale la pena recordar, mientras que en las stories veremos otro tipo de recuerdos, como la foto del platillo que le acaban de servir y que no esperaba que luciera tan exótico, tratando de compartir con lo suyos esa misma sorpresa espontánea que se acaba de llevar.
Otro factor a considerar es que Twitter ya tiene su propio grado de efimeridad. Considero que un tweet, por naturaleza, ya es efímero. No lo digo porque se vaya a borrar para siempre, sino porque en Twitter fluye un mar de información y a una velocidad considerable que hacen que los tweets tengan un periodo de atención mínimo. Aquí vale la pena compartir constantemente información lo suficientemente interesante para atraer la atención de los seguidores, de lo contrario, los tweets suelen pasar desapercibidos y es ahí donde se vuelven efímeros.
Siguiendo con mi análisis, sostengo que tal vez las LinkedIn Stories también están condenadas a desaparecer, porque siento que esta red social no se presta mucho a la espontaneidad, por lo tanto el formato de historias pierde valor. En esta red, las personas se la piensan bien antes de publicar algo, pues al fin y al cabo es aquí donde nos mostramos profesionales antes que espontáneos.
Como podrán ver, cada vez es más común la copia, imitación, plagio o como le quieran llamar, que se da entre las redes sociales, ya sea ante nuevas redes o ante las innovaciones que sacan. Es por eso que sigo atento a lo que pasa entre Club House y las demás redes sociales, ya que incluso empresas como Facebook y Twitter, ya cuentan con su propia versión de comunicación exclusivamente auditiva muy al estilo de Club House. Así que muy seguramente próximamente les estaré hablando de este análisis.
¿Cuéntame, vas a extrañar los Fleets?