Conformar un equipo de trabajo para redes sociales puede ser una tarea tan complicada como lo son las mismas relaciones interpersonales. Tener presencia en redes sociales podría entenderse como una obligación y no como una opción; como lo menciona Erik Qualman en Socialnomics, lo importante es saber qué tan bien lo vas a hacer.
Una estrategia de comunicación para redes sociales requiere conocimientos precisos para poder ejecutarla. A continuación, se describen los conocimientos, aptitudes y actitudes necesarios para implementar un buen trabajo.
Dirección
El trabajo de redes sociales requiere de una persona que sea encargada de dirigir el equipo de trabajo, como un director a una orquesta, tomando decisiones e implementando estrategias que permitan alcanzar con mayor eficacia los objetivos planteados.
– Conocimientos: Comunicación, marketing, publicidad, relaciones públicas, diseño gráfico.
– Aptitudes: Toma de decisiones, motivación, liderazgo, trabajo en equipo.
– Actitudes: Seriedad en la toma de decisiones, flexibilidad con el equipo en su forma de trabajo, emprendedor, siempre proactivo, con iniciativa y con energía.
Estrategia
Medir, analizar y proponer son tres de las principales características que se deben contemplar para la persona encargada de la estrategia en redes sociales.
– Conocimientos: Comunicación, marketing, publicidad, social media, relaciones públicas.
– Aptitudes: Toma de decisiones, análisis, investigación, buen discurso.
– Actitudes: Tiene iniciativa y creatividad, es proactivo, tiene gusto por la lectura, siempre se está informando de nuevas tendencias y conocimientos en el sector, gran poder de convencimiento sustentado.
Contenido
Tener un generador/curador de contenido en el equipo de trabajo es importante para siempre tener algo por compartir con los seguidores en redes sociales. Este personaje debe saber cómo categorizar los mismos contenidos de los que puede hablar la marca con la que se esté trabajando.
– Conocimientos: Comunicación, letras, idiomas y lenguas, filosofía.
– Aptitudes: Excelente redacción, excelente ortografía, amplio conocimiento de las reglas gramaticales.
– Actitudes: Gusto por la lectura y escritura, siempre está leyendo e informándose con nuevo contenido y diferentes tendencias en los medios digitales, es innovador y proactivo, propone junto con estrategia.
Equipo de trabajo en social media
Además de administrar los perfiles en las redes sociales, su trabajo consiste en generar comunidades digitales a través de la interacción constante con los seguidores. Para ello es necesario realizar un ejercicio de social listening, que permita conocer las tendencias del momento, así como los temas de conversación.
– Conocimientos: Comunicación, marketing, relaciones públicas.
– Aptitudes: Buena redacción y ortografía, conocimiento de las redes sociales y sus usos, de reacción inmediata, contempla las crisis y las prevé.
– Actitudes: Gusto por las redes sociales, innovador, proactivo, siempre busca las tendencias para utilizarlas a su favor, es dinámico y tiene facilidad de palabra para entablar conversaciones.
Diseño gráfico
Será la persona responsable de la parte audiovisual que ilustre la estrategia de communicación en redes sociales.
– Conocimientos: Diseño gráfico, comunicación.
– Aptitudes: Comunicación verbal y escrita, recursos retóricos, manejo de software especializado, fotografía y video.
– Actitudes: Es innovador y busca inspiración en cualquier cosa, incluso en el trabajo de otros, es divertido y trabaja bien en equipo.
Otro perfil que no debe pasar desapercibido, y que siempre será un aliado estratégico para la comunicación en redes sociales es un programador que conozca el movimiento del sitio web y que apoye con la implementación de códigos como el de analytics de Google o el Pixel de Facebook para comenzar a obtener información de los seguidores.
Es cierto que las empresas y agencias que requieren de servicios Social Media, en ocasiones consideran pertinente que solo una persona sea la responsable de realizar todo el trabajo con el afán de ahorrarse algunos pesos. Y aunque no se comparta esta idea, no está de más que los profesionales de la comunicación tengan las bases de los conocimientos, aptitudes y actitudes que arriba se enlistan dentro de un mercado cada vez más competitivo que continúa valorando la teoría de Darwin.
Saber pensar, para saber hacer.