Todos los días nos vemos impactados por miles de anuncios publicitarios donde vemos una imagen que muchos quisiéramos imitar y, me refiero específicamente a la moda. Existen diversos segmentos para la misma. Las tendencias son claras y los grandes diseñadores van presentando sus creaciones anticipadas para cada temporada; Primavera-Verano, Otoño-Invierno que eventualmente se va masificando hasta que tenemos certeza de que algo está de moda o no. No es difícil darse cuenta porque lo ves en todas partes pero no necesariamente en el momento que fue creado para ciertos segmentos exclusivos sino cuando ya se ha cubierto todo el mercado. De hecho ese es un indicio de que ya llegan las nuevas colecciones exclusivas para cierta “elite”.

Habrá personas para las cuales un producto de la temporada anterior no tenga validez y habrá otras personas a las que no nos importa tanto eso y que pensamos:“De la moda, lo que te acomoda”. De cualquiera de las dos formas no estamos exentos de la misma y debemos aceptar que definitivamente es una forma de expresar nuestra personalidad y crear un estilo.

Si lo ves de esta manera se convierte en una inversión que puede llegar a ser un lujo dependiendo del tipo de producto que decides comprar. Cuando inviertes en producto fuera de tu capacidad de compra regular, ciertamente es un lujo que recibe tu mayor aprecio. Cuando es un producto que fácilmente puedes comprar puede convertirse en parte de tu estilo de vida si éste llena tus requerimientos y entonces podrías desarrollar cierta lealtad. Éste es el tipo de clientes que las empresas, firmas, marcas buscan, pues son parte de sus ganancias recurrentes.

El vestir es una necesidad básica, nos protege y nos ayuda a no pasar frío o a sentirnos cómodos. Pero nuestra imagen también está ligada a quienes somos, y como siempre, esto es parte de la interpretación colectiva… esto es parte de no vivir solos en el mundo y no podemos evitarlo.

Como siempre digo, no requieres de gastar demasiado para verte bien. La mayoría de las veces es cuestión de conocerte y aprovechar tu personalidad.

Hablando de si la moda es un lujo, ciertamente: muchas veces lo es. Las marcas de moda desarrollan cierto tipo de estrategias que contribuyen a aumentar su valor en el mercado y que las pueden ubicar en un segmento Premium o de lujo. Algunas de ellas son:

-El precio no está determinado para generar un volumen de compra sino para obtener una alta, muy alta, rentabilidad.

– Las promociones no son utilizadas con alta frecuencia porque pueden llegar a devaluar la imagen de la marca. Sin embargo, si saben implementarse pueden ser muy exitosas. Una buena manera de hacerlo es que estén ligadas a una experiencia para el cliente objetivo. No se trata de no hacerlas sino de hacerlas bien.

– El servicio es y debe ser parte de la experiencia de compra.

– Son congruentes al implementar su actividad de marketing con respecto a su imagen y posición en el mercado.

– Sus clientes son exigentes, por lo cual ellos mismos también lo son con sus procesos y productos.

Como en cualquier estrategia mercadológica, considerar la mezcla de “marketing” es la base de la misma. No hay una mercadotecnia para cada tipo de negocio, hay una estrategia que funciona o no para tu producto y tu mercado. ¡Hasta pronto!