El lanzamiento de cualquier marca con lleva una serie de pasos que se requiere estén bien planificados para que al momento de que nuestro producto salga a la luz, lo haga con los menores tropiezos.
Queremos generar conciencia de la existencia de nuestra marca utilizando estrategias y campañas que nos lleven a crear una imagen única y diferenciada en el mercado.
La creación de una marca puede dividirse en tres:
Estrategia de marca.
Como parte de la estrategia de marca debemos tener claro el objetivo, la competencia y el público.
Primero que nada, debemos identificar la audiencia a la que queremos dirigir nuestro producto. Y nada mejor que realizar un estudio de mercado que nos permita validar que el target soñado es realmente el público que está interesado.
No importa si se trata de una marca grande o pequeña, el consejo siempre será evaluarla entre los posibles clientes para poder conocer de qué forma transmite la idea de que nuestro producto llega a resolver una necesidad de un público y así tener un panorama de los posibles resultados a obtener.
Una vez definido y validado nuestro público objetivo requerimos realizar una correcta planificación de tiempos y recursos. ¿Estarán listos los materiales para el día del lanzamiento? ¿Tenemos los permisos para realizar activaciones en la calle?
Identidad de marca.
¿Cuál es nuestro propósito, qué promesas estamos haciendo? ¿Cuál es la personalidad de nuestra marca?
Debemos tener claro cómo vamos a presentarnos a los demás. La identidad de marca se nutre de la personalidad que le damos. La voz que se le otorga y el tono que definirá la comunicación que hagamos.
Aquí interviene nuestro logotipo, los colores y fuentes, el diseño de nuestra página web, los contenidos y mensajes que vamos a comunicar.
Los valores con los que queremos ser asociados estarán plasmados en todos los canales por los que nos vayamos a comunicar con los usuarios. Debemos poder ser distinguibles y coherentes en lo que decimos.
Una marca se construye por la percepción que el cliente tiene de nuestra empresa. Por tanto, tengamos cuidado sobre qué mensajes comunicamos, qué decimos y cómo lo decimos impactará positiva o negativamente esa marca que estamos construyendo.
Marketing de la marca.
Es claro que no todos los negocios cuentan con grandes presupuestos de marketing y con mayor razón debemos saber utilizar los recursos con los que sí podamos disponer.
Obviamente dependiendo de esos recursos la visibilidad de nuestra marca podrá será mayor.
Cuando hablamos de una empresa pequeña o de un emprendimiento, los recursos casi siempre están más limitados pero no por eso no se pueden hacer grandes cosas.
Las campañas de descubrimiento a través de redes sociales pueden ayudarnos a llegar a clientes potenciales apoyadas de una estrategia de marketing de contenidos. Debemos ser capaces de contar en poco tiempo una historia, ofrecer contenido de valor o demostrar porqué nuestro producto puede ayudar a resolver el problema del usuario.
El lanzamiento de una marca puede darse en cualquier momento si es que estamos preparados para ello, pero la reputación de una marca no sucede de la noche a la mañana.
Intervienen muchas cosas para lograr un posicionamiento eficaz de nuestra marca:
- El entorno (situación de salud, económica o social que se esté viviendo)
- El presupuesto con el que contemos para promocionarnos
- El alcance de nuestro material publicitario (impreso o digital)
- Contar con una buena página web y un sitio de aterrizaje adecuado
- La publicación constante de contenidos de valor
- Un buen servicio al cliente
- Contar con un equipo profesional de ventas
- Que todas las personas de nuestro negocio sepan qué hacemos y por qué lo hacemos
Una adecuada estrategia de marketing y el esfuerzo continuo de los involucrados nos llevará a establecer relaciones a largo plazo con los clientes potenciales y hará que nuestra marca se quede en la mente de los consumidores.
Una respuesta
Como siempre muy interesante y contenido de la información que nos compartes, me gusta mucho.
Saludos,