En un viaje de dos meses por Europa no pude evitar comparar las técnicas publicitarias y comportamientos de consumo del viejo continente, con la publicidad malinchista que existe en México.
Acompáñame en este viaje y déjame saber tu opinión.
México malinchista
A lo largo del tiempo y desde el comienzo de toda civilización, el crecimiento se ha dado a velocidades diferentes. En México, este fenómeno ah desarrollado un choque entre culturas y preferencia al extranjero, conocido como malinchismo.
El malinchismo nace de la Malinche, mujer indígena que fue esclava y después traductora. Alejandro Tomasini , investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México, califica a este comportamiento como una “enfermedad nacional” para el país y lo define como el fenómeno de preferir a ciegas lo extranjero. “Se dice de alguien nacional inclinado hacia lo que está afuera, menospreciando lo que es propio o del lugar de donde es”.
¿Tú qué prefieres? ¿Comprar productos hechos en México o del extranjero? Un estudio global realizado por Paypal, informó que el 71% de los compradores en línea se inclinan por realizar compras del extranjero, del cual, el 25% fueron de 35 a 44 años, seguido por las personas de 25 a 34 años con 24%.
Identidad Extranjera
Para hablar del extranjero, en específico a la Unión Europea, a pesar de conformarse por varios países y diferentes culturas existen muchas similitudes en sus técnicas publicitarias y comportamientos de consumo. Para ello, es importante resaltar el nacionalismo, clasismo y racismo que existe en el viejo continente.
La identidad Europea
La Unión Europea nace oficialmente en 1950 en donde los gobiernos europeos acordaron unirse en la CECA, bajo la idea de que si ponían en común la producción del carbón y el acero, se evitaría otra guerra entre Francia y Alemania. La unión fue pensada de forma económica y política principalmente, pero también, se vendió la idea de lograr aumentar el nivel de vida y mejorar en el bienestar social, lo que significaría menores posibilidades de una contienda.
Irene Correas de la Universidad de San Pablo, menciona que la crisis que actualmente vive la Unión Europea deriva de la puesta en común del comercio “y el sometimiento a una autoridad común fue sólo el germen de un modelo de construcción que se ha mostrado exitoso” pero que ha crecido a diferentes velocidades.
Un efecto secundario de esta crisis, tanto migratoria, política y económica ha sido potencializar el clasismo y racismo, puesto que, hay que tener en consideración que un “enemigo en común” es una estrategia de polarización que “busca dividir a la audiencia en dos segmentos definidos por valores y preferencias” para formar comunidad.
Técnicas publicitarias y comportamientos de consumo en Europa
Otro efecto que nace de la creación de la Unión Europea es el nacionalismo Europeo. Sentir orgullo, tanto de sus países, como de pertenecer al viejo continente lo reflejan a través de sus productos, sus idiomas, su consumo y su propia publicidad.
Comportamiento de consumo
Los productos europeos, principalmente evocan a dos cosas: el pasado y al campo.
Para gran parte de la comunidad, el pasado y el campo es sinónimo de calidad pues representa el trabajo del hombre bien hecho y honesto, cuando en México, pasa totalmente lo contrario. Entre más industrializado esté el producto mayor confianza se tiene.
“La decisión de compra del Europeo, desde siempre guiadas por la percepción de calidad, se ven crecientemente influenciadas por el factor de precio y por la tendencia a consumir saludable” Ramón Vidal, jefe del programa del UE de apoyo al AACUE.
Un producto que en Italia costa 3 Euros, en Francia a tan solo unos cuantos kilómetros, se encuentra ese mismo producto italiano en 7 Euros, por lo que es preferente comprar lo nacional… o productos chinos.
Asimismo, los productos y la publicidad europea, está segmentada y muy diferenciada por el poder económico, color de piel o si eres residente o turista. Cualquiera es libre de comprar, pero estos factores influyen en la decisión de compra de cada grupo social dentro de la Unión Europea.
Técnicas publicitarias
Otro fenómeno a resaltar, es el respeto o poderío del idioma. Sus productos (si son exportados) no se encuentran con etiquetas en el idioma del país vecino, como en México. Respetan o imponen el idioma procedente.
En radio y televisión evocan, a la antigua, un humor sexual o inocente a través de la magia del storytelling. De igual forma, las 4 principales técnicas que utilizan son: la música, el humor, la asociación y los testimonios.
Algo que hay que resaltar en los productos Europeos es la intención de no solo vender por vender, sino ofrecer un valor agregado por medio del cuidado al medio ambiente, ofrecer una huella de valor o contribución social. Este fenómeno parte la exigencia social colectiva, por lo que la publicidad, los productos y acciones de la empresa toman acción en este rubro para no perder credibilidad y posicionamiento en el mercado… lo cual me hace cuestionar ¿En México pasa esto?
A pesar de la exigencia ambiental y lo natural, este incrementa su precio por lo que el mercado chino, sin ninguna técnica publicitaria, compite con su propio mercado como los turistas, refugiados y clase baja. Los tres grupos van a la alza.
México en un sueño
La idealización y los sueños, no son más que ecos del deseo y desesperación.
México es un país que lleva poco más de 200 años de consolidarse y tiene la unión de muchas culturas y mezclas lo que lo vuelve un país megadiverso en cultura; sin embargo, esta diversidad no ha consolidado una identidad propia y nacionalismo como lo países de Europa.
Preferir el extranjero, no solo es el resultado de una conquista, es la falta de educación e identidad que ha arrastrado por siglos. Las nuevas generaciones son las más vulnerables a este fenómeno, pues la digitalización en un mundo globalizado vende la idea y aspiración de un mundo fácil. ¿Te has preguntado porque las empresas extranjeras invierten en México? No es por su posición geográfica, es porque se vende hasta una roca o un celular con las mismas características que la generación pasada.
Ahora, la publicidad malinchista parte del propio gobierno, la sociedad y las propias empresas extranjeras y mexicanas. Ofrecer lo que le gusta al cliente mexicano; producto extranjero, desde sus propios aguacates hasta productos más industrializados o poner gente blanca en comerciales.
El conjunto de la sociedad, la empresa y gobierno puede apuntar a un consumo responsable y nacionalista para satisfacer las necesidades necesarias desde su propia publicidad para reeducar a un pueblo que se ha adsorbido por la preferencia extranjera y se refleja por medio de una publicidad malinchista.
“Las personas sin conocimientos de su pasado, su origen y su cultura, son como un árbol sin raíces”.
Marcus Garvey