Es impresionante cómo se puede uno dar cuenta de que la temporada de elecciones en México se aproxima. La carroña empieza a invadir las redes de forma silente y sigilosa.
Hace algunos meses me percaté de que una cuenta de Twitter que abrí para interactuar con un personaje famoso empezaba a crecer solita.
Es una cuenta que estuvo creciendo mientras cumplía su cometido para un propósito muy específico. Curiosamente, algunos seguidores de aquel personaje encontraron interesante el intercambio de opiniones que tuve con el susodicho durante ese lapso. En ocasiones retuiteaban o marcaban “me gusta” y paulatinamente fue ganando uno que otro seguidor.
Hace algunas semanas me empezaron a llegar avisos de actividad en esa cuenta, que sólo verifico de forma esporádica, y me sorprendí. De repente los seguidores se activaron y pensé que era por mi gran ingenio, tanto en nombre como en contenido, y alguien(es) lo habrían descubierto.
Y ¡zas! ya cuando me puse a revisar, hice el tremendo descubrimiento: todas las nuevas cuentas que se agregaron son huevo. Eso quiere decir que los “estrategas” de los políticos ya andan a la cacería de seguidores, para agrandar su ejército de bots y hacerlos parecer reales.
Los puedes identificar re-fácil. Uno, el más obvio, no tienen foto, sólo huevos. Dos, tienen menos de diez seguidores. Tres, casi no han tuiteado o no han tuiteado nada. Cuatro, su nombre por lo general incluye un número random.
Mira las capturas de pantalla… en la imagen 2 puedes ver ejemplo del nombre y la falta de actividad del usuario.
No les ayudemos a hacer trampa. Están preparando el terreno para 2018. Revisa tus seguidores de cuando en cuando y, ya que los identifiques, ¡bloquéalos! De esa forma, ni se suman a tus seguidores, pero tú no les cuentas a ellos #PasaLaVoz