El Design Thinking se popularizó en la década de 1990, pero tiene sus orígenes entre 1950 y 1960 en una escuela de diseño en Alemania, donde se desarrollaron las primeras ideas sobre el diseño centrado en el usuario.
Design Thinking es una metodología que se centra en las necesidades y deseos del usuario, y que se ha convertido en una herramienta fundamental para las empresas que buscan innovar y mejorar sus productos y servicios.
5 pasos del Design Thinking:
Paso 1: Empatía
– Entiende el problema o desafío que se quiere resolver. Podrías tener varios temas a resolver, pero es importante que elijas uno y completes el proceso completo antes de pasar al siguiente problema.
– Observa a los usuarios y sus comportamientos.
– Entrevista a los usuarios para entender sus necesidades y deseos. Puedes obtener grandes insights que ampliarán tu panorama antes de entrar al siguiente paso.
Paso 2: Definición
– Analiza la información recopilada en el paso de empatía.
– Define el problema o desafío que se quiere resolver.
– Establece objetivos claros y medibles.
Paso 3: Ideación
– Genera ideas y soluciones creativas. Todas las ideas son bienvenidas.
– Realiza sesiones de lluvia de ideas con equipos de diferentes áreas, pero que estén involucrados en el proceso: producción, marketing, diseño, ventas.
Paso 4: Prototipeo rápido
El prototipeo rápido es un proceso que implica la creación de prototipos de baja fidelidad para probar y refinar ideas de manera rápida y eficiente. Esto permite a las empresas validar sus hipótesis y tomar decisiones informadas antes de invertir recursos en la producción de un producto o servicio.

Objetivos del prototipeo en Design Thinking:
1. Probar y validar las hipótesis y suposiciones que se han hecho sobre la solución.
2. Recopilar retroalimentación y comentarios de los usuarios y stakeholders para mejorar la solución.
3. Reducir la incertidumbre y el riesgo asociado con la implementación de la solución.
4. Mejorar la comunicación y la colaboración entre los miembros del equipo y los stakeholders.
Una vez realizado lo anterior, pasamos al quinto paso: La prueba
– Prueba las soluciones y prototipos con los usuarios.
– Evalúa el rendimiento y la efectividad de las soluciones.
– Ajusta y cambia las soluciones según sea necesario.
Diferentes marcas han empleado el prototipeo rápido para probar su idea entre una pequeña muestra de su público objetivo antes de invertir en un gran desarrollo: Instagram, Spotify, Amazon Go, entre otras.
Algunos consejos antes de empezar:
- Define claramente el propósito del prototipeo.
- Mantenlo lo más simple posible
- Utiliza lo que tengas a la mano, bocetos, papel, cartulina
- Crea múltiples versiones, realiza un AB test
- Escucha y observa atentamente los comentarios y comportamientos de los usuarios reales
- Tras esa prueba, mejora y vuelve a presentar
- Documenta el proceso
La idea principal del design thinking es ejecutar todo el proceso de desarrollo de una idea en menos tiempo del que lleva normalmente, es por ello que se involucran más personas que puedan aportar diferentes formas de ver el problema y que podrían detectar soluciones que no estamos viendo.
Cuéntame, ¿has ejecutado este proceso para la generación de nuevas ideas, productos o servicios?